“¿Hay quien de más…?”

088LOS JÓVENES  ESTUDIANTES CATÓLICOS:  ¡SOY UN AFORTUNADO¡

Ayer Alfonso, Viceconsiliaro de la Acción Católica  a nivel estatal, me preguntaba en medio de la barahunda de un centenar de jóvenes estudiantes en Madrid, que qué edad tenía yo. Le dije que voy a cumplir cincuenta y tres años ( 27 de Marzo)  y me dijo  que era el mejor momento para lo que traigo entre manos. NO sé si es la mejor edad pero si sé que soy un cura afortunado, que me encanta lo que hago, pero sobre todo que disfruto con lo que siento que tengo que hacer desde mi ministerio en este momento actual, tanto desde la delegación de pastoral universitaria en mi diócesis, como desde esta labor de consiliario general en el movimiento de JEC.

Este fin de semana,  ha sido unos de los momentos en que cuando llegas a casa y te metes en la cama rendido pasada la media noche, el espiritu se mueve dentro con placidez y quietud y te hace sentir la gracia a fondo para que te recuperes ya lo día siguente puedas seguir el camino.

126Salimos de Badajoz a las tres y media de la tarde una decena de personas y el autobús fue llenándose de rostros y vida paso a paso,  Mérida, MIajadas, Navalmoral… se reencontraban y se saludaban con el gozo y la alegría propios de los jóvenes y yo disfrutando. Se llenó el autobús y todos a la casa de campo a un albergue juvenil de esos que están muy bien preparados y que tienen precios asequibles para jóvenes estudiantes. Allí nos juntamos un centenar entre chavales  de institutos, universidades y graduados, amén de animadores y consiliarios. Todo un milagro de lo pequeño y lo sencillo en medio del mundo. Venían al gozo del encuentro por etapas, en el que se trata de animar las campañas que se están llevando a cabo en el medio estudiantil.

006Cena de los pueblos para comenzar con quesos, chorizos, tortillas, dulces.. propios de cada lugar, nos conocemos y nos “comemos” y buen metodo de conocimiento, el ambiente familiar cien por cien, los que venían por primera vez ya se sentían en su propia casa. Al día siguente  a las ocho de la mañana en pie, algo no normal en los  sábados y los domingos de los adolescentes,  desayuno, oración participada, alegre, viva, entrañable, luminosa, tranquila, espaciada… y  de ahí a trabajar por etapas lo descubierto en los primeros meses de campaña, encuestas con los compañeros, análisis, debates, interpelaciones, conclusiones, descubrimientos.. todo un lujo, cada uno a su nivel. Los de secundaria con su generación “ni-ni”, ni me callo ni te callo, para ser auténticos, libres  e iguales en el medio; los de universidad  un estudio para   la vida y para los otros; los graduados el dinero para vivir y no al revés. Todo un lujo.

030Después había que entrar en lo propio de los cristianos, el “discernimiento”, el juzgar. Y una pregunta fundamental: ¿Cómo juzga el Dios que no ha venido a condenar sino a salvar? ¿Cómo lo hacía Jesús?- Juzgar es hacer justicia a la historia, justificarla, hacer que tenga sentido; iluminar todas sus oscuridades para que todos tengan vida en abundancia. O sea que libertad de expresión para que haya justicia,  estudiar para que haya más justicia en la historia, el dinero para compartir yhacer comunidad.  Entendimos perfectamente a los jóvenes estudiantes de Egipto, de Libia… jóvenes para que otro mundo sea posible. ESe es el juicio que Dios quiere.

035La Eucaristía nos presentó la cruz y el pan con el veredicto de Dios para la humanidad, tanto amó Dios al mundo que le entregó al  Hijo querido de sus entrañas; el juicio de Dios es el pan partido para que todos coman, como hicimos nosotros en el sacramento central de la vida cristiana. Desde ahí al actuar: cómo, cuando, dónde, a quién… queremos transmitirles lo que vivimos, lo que soñamos, nuestra utopía de la vida y el Reino.  ¡ A la calle, a las plazas, a los institutos, a las universidades, a  los botellones… mucho trabajo, pero también mucha ilusión.. son muchos los que luchan y quieren otro mundo.

073Ahora otra vez en casa, con más vida y con más Dios dentro, con una luz que nadie nos podrá quitar, con un juicio que da esperanza, que sana e ilusiona.  Qué gozo y qué milagro: cien jóvenes  estudiantes con el fuego de Dios dentro de sus corazones queriendo colaborar con el Padre para que su buena noticia de salvación y de vida llegue a los estudiantes y a los pobres de nuestro mundo. “¿HAY QUIEN DE MAS…?  Y yo viéndolo y oyéndolo… así como os lo cuento, “Gracias, Padre”

2 Responses to ““¿Hay quien de más…?””

  1. Muy buen resumen del encuentro Pepe, para mi ha sido otra experiencia más con la JEC que hace que mi fe se haga aun más intensa y como no, más fuerte.

    Un abrazo, y ¡gracias por todo este fin de semana!

  2. Qué bien nos lo hemos pasado en Madrid ¿verdad Pepe?.
    Este encuentro me ha permitido reencontrarme con amigos ya conocidos de la JEC y tambien conocer nuevas caras.Tambien me ha servido para darme cuenta de una cosa:que pongo una especie de máscara negativa sobre mis profesores en la universidad porque siento que voy mal en mi carrera.No sé si podré cambiarlo porque eso es más fuerte que yo.Quiero tener siempre momentos muy felices con ellos o fuera de la universidad como por ejemplo ir este verano a las JMJ Madrid 2011.