Los jóvenes ven…(El estudio)

“Dime cómo, por qué y para quién estudias … y te diré  tu altura y profundidad”

–          En este mundo de mercado, La economía se convierte en dadora de sentido del estudio: se ha impuesto un sentido del estudio y de la carrera desde la “salida” en claves mercantilistas, la tríada  estudio, persona, vocación, para estructurar la “profesión” (ser para los demás) se ha obnubilado y todavía más se agudizado con la crisis. El éxito viene dado por la posibilidad de que el estudio me acabe posibilitando un nivel de consumo seguro y agradable. El criterio de seguridad se impone como dogmático en el orden externo, que no interno de la persona.

–          El estudio se convierte en modo e instrumento de construcción de la persona desde la clave del éxito y este criterio rompe los elementos más humanizadores del mismo potenciándose:

  • El sentido individual y competitivo.
  • Puramente práctico y aplicado en orden a lo económico.
  • Sin ideología.
  • Sin criterio de reflexión crítica, ni participativa, ni educadora en sentido integral.
  • Falta el ambiente comunitario, social, constructivo y alternativo del ser y el hacer el estudio.
  • Desconexión con los problemas sociales y humanos de la historia.
  • Se entiende como un instrumento al servicio del propio “yo”, desde ahí se siente y se vive  la “excelencia”.

SIN EMBARGO:

–          La crisis nos está espabilando, está cuestionando este sentido del estudio y está dando la razón a aquellos que  han entendido más el estudio desde la vocación y sus bienes internos que  desde  lo puramente externo.

–          No se agotan los auténticos que gozan de lo que hacen porque su estudio ha estado dirigido con una finalidad humanizadora.

EN LA JEC:

–          En nuestros proyectos de vida y militancia activa se van poniendo de relieve cuestiones propias del ser del estudiante que  nos muestran horizontes de un estudio con claves liberadora para nosotros  mismo y para los demás:

  • Un estudio al servicio de la construcción de la propia persona que lo realiza, en orden a ser autónomo y libre en medio de la sociedad.
  • Un estudio con sentido: crítico, personalizado y con proyecto integral.
  • Un estudio comprometido y solidario, en orden a ser realmente feliz.
  • Un ser estudiante que se hace desde la participación  y la asunción de la realidad escolar.
  • Un estudio conectado con la sociedad y sus necesidades  y que quiere estar preferentemente dirigido a los más pobres en orden a construir una sociedad más justa y más fraterna.