Deseo cumplido

LA PASCUA DE  LA ALEGRÍA…

“He deseado ardientemente  celebrar esta Pascua con vosotros”, así hablaba Jesús a sus discípulos en aquella pascua judía que se convirtió en la referencia universal de la nueva pascua Cristiana para cientos de generaciones y millones de personas, hasta llegar a nosotros. Yo, hoy  en la octava de  Pascua, confieso que vivido ardientemente la  Pascua con ellos, los jóvenes estudiantes católicos de  España (JEC). El miércoles santo preparaban sus mochilas, sus sacos de dormir con una dirección concreta y singular: el convento de los franciscanos de Fuente del Maestre, que se ha convertido en casa de la Parroquia, y que nosha acogido con su sabor centenario a la vez que novedoso y esperanzador. Ha sido un encuentro formativo  y celebrativo para jóvenes estudiantes. El tema central de este año  la alegría, “pon una nota de alegría”, el slogan de la convocatoria.

La alegría es una emoción  fundamental para la realización de la existencia humana, la buscamos y la necesitamos para poder ser y poder alcanzar la identidad propia de una vida que se considera digna y llena; siempre la humanidad la ha buscado y se ha interesado por obtenerla. Los caminos para alcanzarla han ido desde lo más básico, como cubrir la necesidades elementales del ser humano, hasta el poder alcanzar deseos, cuando no caprichos, que nos llenan de sensaciones placenteras y festivas. Pero esto que parece ser tan fácil, no tiene itinerarios claros y definidos, más bien ambiguos  y tortuosos, porque cuántos ciudadanos actualmente nos responderían afirmativamente si  les preguntamos si se sienten felices y satisfechos  en el momento actual, ¿qué nos responderían los millones de parados, o los que consumen los fármacos que más se dispensan en nuestras farmacias y que son depresivos y  antiansiolíticos, y  los ancianos, y… Nosotros mismos?

Necesitamos un discernimiento profundo,  que siempre ha estado en la palestra pero que ahora se hace más urgente y grave por la crisis que padecemos en nuestra sociedad, y es el que se refiere a la relación entre “bien-estar”  y “bien – ser” como camino de alegría y felicidad. Cuando se impone el bienestar en la sociedad como criterio casi único  de realización y felicidad, enseguida aparece la clave de la seguridad como elemento fontal de la alegría plena, y el individuo se ve llamado a competir y defenderse para poder llegar a asegurarse el éxito que garantiza cierta plenitud en el bienestar; pero esta alegría o felicidad, se convierte en dependiente de elementos muy externos que además necesitan el reconocimiento de los otros, y eso es darle la llave de nuestra alegría  a poderes que son extraños: mercado, consumo,  dinero, posición social, currículum, premios y reconocimientos… Entonces vivimos desde la lucha, pero sobre todo desde el miedo. Un miedo que tiene componentes humanos muy distintos:  están los que provocan y causan miedo, porque sus decisiones imponen o quitan bienestar con una fuerza superior  (los mercaderes); los que sufren el miedo y el dolor de una cruz pesada (pobres, parados, inseguros…) y que son los más; los que por miedo se paralizan y sólo quieren seguir seguros, y aunque se dan cuenta de la maldad del sistema y del sufrimiento de los otros, sólo se preocupan de no tentar a los que tienen poder, y asegurar su cuota pequeña de “felicidad segura” en su pobre individualidad y parcela afectiva y placentera (clase media).

Pero  también están los que se enfrentan al miedo: a los que lo causan (el faraón en Egipto), a los que los sufren poniéndose a su lado y entendiendo la historia desde ellos (pobres y crucificados siempre presentes en la historia);  interpelando a los que se adormecen y se venden por pequeños platos de lentejas de la seguridad( la masa de la sociedad acomodada con un bienestar parcelado y excluyente); los que se arriesgan y se abrazan a la cruz no para perpetuarla sino para transformarla. Estos son los que han entendido que el bienestar requiere del bien ser para ser auténtico y humano, y que no pueden doblegarse y entregar el “bien-ser” para asegurar el “bienestar”, porque éste sin aquél es engañoso, y aunque aparentemente otorga alegría no es verdadera, ni permanente, porque se asienta sobre caprichos, injusticia, y mentiras, y se convierte en causa de pena y tristeza para otros, los más débiles; sabemos que toda alegría que suponga dolor  y tristeza para otros no es verdadera aunque nos entretenga y nos de placer; no deja de ser un sucedáneo de lo verdadero.

Los jóvenes estudiantes  de distintos puntos de España, en Extremadura (Fuente del Maestre)  dispuestos  a  buscar el verdadero camino de la alegría, lo han hecho desde el espíritu cristiano de la Pascua, donde se celebra que la vida ha vencido a la muerte; que los que crucifican no tienen la última palabra, que los crucificados  tendrán vida abundante, que los dormidos pueden despertarse del sueño de un bienestar engañoso que la crisis pone al descubierto; y que en esta vida para llegar a ser felices el camino es el del riesgo atrevido de soñar una humanidad fraterna y justa,  y que todo empeño en esta dirección aunque pase por  fracaso y aparente frustración acabará en la alegría que nada ni nadie te podrá quitar nunca.  Ellos lo han planteado desde el hoy de la sociedad, desde su juventud, y desde sus ambientes concretos de estudio, institutos y universidades, quieren ser jóvenes estudiantes con sentimientos de Cristo, que luchando contra los miedos que provocan la tristeza y paralizan, se enfrentan a ellos y cargando con la cruz de los que sufren, caminan hacia la cima de la verdad , del amor y de la justicia, donde la alegría es auténtica porque es de todos y para todos, porque el “bien-ser”  fundamenta mejor que nada ni nadie el verdadero “Bien-estar”. Ha sido otra semana santa, yo desde luego  he visto cumplido mi “deseo ardiente celebrarla con todos ellos”

ALELUYA¡¡¡¡

9 Responses to “Deseo cumplido”

  1. Esta Semana Santa, mucha personas han salido de vacaciones, otros se quedaron descansando. Yo, me he ido a un pueblo,perdon,(ciudad) de Badajoz a celebrarla con 80 jóvenes de la JEC. Y puedo decir que he vivido continuamente una “Pascua” en sus varios sentidos. En algunos momentos sentía que era una “cruz”, por el frío, que ha sido mucho, por los colchones… pero cuando sentía el “calor” y los abrazos era vivir la “resurrección” anticipada. A veces pensaba : ¿ Que hago yo aquí, a mi edad y con mis “limitaciones”, pensaba “esto no es para mí” y por que no decirlo, para cuatro días de vacaciones que tengo vengo a “gastarlos” aquí. Pero cuando me cruzaba con los chicos y sus caras de alegría, cuando nos reencontramos con los que hace tanto que no vemos y son cómo de mi familia. Cuando he vivido las celebraciones desde dentro, siento que he vivido una PASCUA que me sana y me cura, que me hace crecer y amar más a otros.
    No puedo negar que eché de menos al resto de mi familia que no estaba allí, pero tambien eché de menos a todos los chicos y chicas que no han ido, sus nombres estaban presentes en mi cabeza en todas las celebraciones. Y me llenaba de alegría ver otra parte de “mi familia” que estaban viviendo en profundidad todo lo que nos da la JEC ,especialmente en este encuentro.
    Hoy, cansada y con sueño,pensando que mañana trabajo (paso de jóvenes de 16 años a niños de 2-3), me siento feliz y alegre, pero con una alegría que no se quita de un plumazo, una alegría que tiene “caras y nombres”, especialmente el nombre de JESÚS, que me sorprende en cada instante y en cada persona. GRACIAS A TODOS los que además habeis trabajado el doble para que los demás estemos tan alegres.¡¡

  2. Verdadero lujo.Como fontanés y crsitiano ha sido para nosotros unos momentos especiales de la resurrección, ver a tantos jovenes con una alegria inusitada a pesar del frio y de las malas condiciones que nos llena de esperanza en un futuro que nos lleve adelante al saber que nuestros “hijos” seguiran por el buen camino.

  3. Por huir me he quedado sin mi nariz de payaso… pero te aseguro que ya ha llegado el contagio a estas tierras… ¡Enhorabuena a todos por el acierto del Encuentro! de forma especial a la Permanente y los insuperables anfitriones…

  4. Me alegro de la alergia alegre de la alegría… Enhorabuena a todos los que hemos compartido la dicha de vivir la Pascua mirando la Buena Noticia entre los libros…

  5. He estado dos días con los Jóvenes Estudiantes Católicos en Fuente del Maestre. Llegué El Viernes Santo aturdido y amedrantado por el bombardeo continuo de noticias fatales sobre la economía en este país. Y aunque a mí ya me va aburriendo, por no decir hartando, el rosario de cifras de millones a recortar por aquí o por allá para dar gusto a ese “señorito” insaciable que tiene las primas; cada vez que oigo la cantinela, me pongo a hacer cuentas y, mira por dónde, a mi la resta no me sale en euros, sino en personas muy concretas y conocidas, a las que, como marionetas estériles, veo que se les va cortando uno a uno los hilos de una vida digna, de un futuro merecido y de una esperanza necesaria como el aire para poder vivir. Podía decir nombres, podía contar historias, podía gritar dramas… Pero, ¿quién no conoce mucho de esto a su alrededor? Pues eso, que llegué a Fuente del Maestre donde están más de 100 jóvenes cristianos, testigos de su fe en los institutos, en la Universidad y en sus profesiones, y lo hice con el mismo espíritu apesadumbrado que inquietaba y dolía a las mujeres que según San Marcos marchaban al sepulcro, preguntándose quién movería la pesada piedra del sepulcro de Jesús. Y es que el pedrusco de esta aborrecida situación, que nos ha caído en desgracia, no parece que haya dios, y menos políticos, que lo mueva. Después de saludar, abrazar y besar y dejarme abrazar y besar, me encaminé a la pobre, destartalada y franciscana celda que me habían reservado para compartir como alojamiento. Según me acercaba, contemplé sorprendido la puerta entreabierta, proyectando un haz de luz que iluminaba el viejo y triste pasillo, observé desde fuera la camas con su sacos descolocados, y entonces comprendí, como las mujeres del evangelio, que el sepulcro estaba abierto y que los mensajeros celestes tenían este día el rostro de estos jóvenes y adultos, a los que no les importaba dormir en tales cuchitriles, incómodos hasta más decir; que son capaces sacrifican con una alegría indescriptible los días de vacaciones para hablar y programar sus vidas desde la fe en Cristo y en su mensaje por un mundo justo, libre y digno para todas y cada una de las personas; y que hacen de sus momentos de oración y celebración un canto vivo a la esperanza y a la confianza inquebrantable en la apuesta de Dios por los pobres y pequeños.
    Para ver la puerta: http://www.facebook.com/profile.php?id=100001890869212

  6. Bien por los jovenes.Celebrando la Pascua como solo ellos saben hacerlo, desde la alegría.

  7. FELIZ PASCUA TODOS LOS AMIGOS DE JESÚS, ES SIN DUDA LA GARANTÍA …

    Saludos ..de una que bebe de la “Fuente que mana y corre”.

    Montaña

  8. […] En medio del mundo: La Pascua de la Alegría por Pepe […]

  9. Cómo no creer en Dios…