Unidos a Isabel
Ayer pude estar presente y acompañar a Isabel, nuestra compañera de clase, en la despedida –entierro- de su madre, me sentí unido a su dolor y recordaba a mi madre recientemente fallecida, por eso quiero compartir con vosotros este poema y así unirnos todos a Isabel en este momento expresándole nuestro sentir solidario y compasivo. Ella durante diez años ha estado a su lado y ha vivido todo el proceso de la enfermedad, ahí ha sido la hija querida que ha compartido dolor, sufrimiento, esperanza, ganas de vivir, así como debilidad y ruptura que se ha hecho determinante en la muerte. Seguro que a lo largo de estos años Isabel ha crecido y experimentado como el dolor integrado nos construye y como la entrega al enfermo nos da vida. Después nos queda la ausencia que hace presente a los que se han ido siendo amados. Así lo siento yo en este poema dedicado a mi madre este verano cuando la echaba de menos en la orilla de la playa donde ella se sentaba para que el agua acariciara sus pies:
EN LA ORILLA
Aquí,
en esta orilla,
la sigo esperando
cada tarde,
cada detalle,
cada caricia;
y sólo me abraza
en brisa
de ternura esperanzada.
Y la sigo añorando,
descalza,
sencilla,
con pasos de madre
que, sin pisar,
van dejando huellas
que no puede borrar
ningún oleaje
de mar olvidadizo.
Y, en la ausencia de su presencia,
me siento habitado;
y, en la pena,
siento y gusto
su gloria y su corona;
que arden en sol
encendido
en el atardecer de la playa.
Y la seguiré añorando y esperando.
Aquí,
madre,
en esta orilla,
te añoro,
te amo
y te sigo encontrando
en la ausencia.
José Moreno Losada
Que decirte…. siento mucho lo ocurrido. Se que tu eres fuerte y saldrás de esto. Tienes que estar super orgullosa de ti, hijas como tu hay pocas, has estado constantemente pendiente de tu madre, la cuidabas, hacias las tareas del hogar… miles de cosas que me contabas. Por ello y por muchas cosas mas tienes que estar super orgullosa y contenta. Allí donde esté ese angelito estará feliz, feliz de verte y de saber todo lo que has echo por ella.
A día de hoy, te doy muchos ánimos, mucha fuerza y a seguir hacia delante se que es muy duro pero tu eres fuerte.
Un besazo amiga
Realmente no se qué decir porque sé que nada te hará sentir mejor en este momento tan doloroso que estás viviendo. Me uno a ti en tu dolor recordando a aquellos que he perdido. Llora, grita, haz todo lo que tengas que hacer porque la pérdida es injusta siempre…pero levántate de nuevo, esta vez más fuerte que antes. Trata de no recordar los malos momentos, recuerda los buenos y también recuerda, que aunque tu no la veas, seguro que ella estará observándoos a ti y a tus hermanos llena de orgullo. Todos habéis hecho lo que habéis podido, sobre todo tú. No te arrepientas.
Sé que no te estoy consolando, no se cómo hacerlo…pienso que es el tiempo el que irá sanando la herida poco a poco y sólo de forma superficial. Sin embargo, te mando desde aquí mi ánimo para que sanes rápido, para que recorras lo más rápido posible el camino del dolor. Un beso y un abrazo muy grande.
Hermoso poema. Me gusta mucho porque a la vez que muestra el dolor de por la ausencia, reafirma la esperanza de la presencia eterna. Si eso no es fe cristiana, entonces no se que lo puede ser.
Isa, antes que nada decirte que siento mucho la pérdida de tu madre. Tras la noticia me quedé impactada. Sólo quiero darte todo mi apoyo a ti y a toda tu familia.
Seguro que has vivido con ella momentos muy felices y tienes que quedarte con todos esos momentos. Ella te cuidará desde el cielo y querrá ver a su hija feliz, saliendo de esta con toda la gente que te quiere y te apoya.
Mucho ánimo Isa, sabes que tienes el apoyo de toda tu clase.
Desde nuestra postura
te vimos, te sentimos
era un trecho camino.
Intentamos solventar
tus varios desánimos,
con la mejor intención.
Sabemos que fue difícil,
pues, una gran batalla
la cual, no debes dar por perdida
hiciste, acompañaste, curaste,
mimaste, besaste…
con mil ganas todo los días,
que no te quede
que no se diga
que fue por su niña querida.
Tras conocer una desagradable noticia. Con esta actividad queremos dar ánimo a nuestra compañera y amiga Isabel. A veces no valoramos lo que tenemos y no sabemos lo importante que es una madre en nuestras vidas, ellas lo dan todo por nosotros, sus hijos, cambiaron sus vidas y se sacrificaron por nosotros. Isabel tiene que decir a dios a esa parte de su vida, de su alma, de su ser, pero estoy segura que ella (su madre) no se ha ido, aun sin verla, ni tocarla guiará a isa en todo su camino, le dará fuerzas en sus malos días y se alegrará de sus victorias. Animo amiga Isabel, ahora más que nunca debes y tienes que ser la persona de la que esa mujer, tu madre, estaba tan orgullosa.