La mala salud de Europa
Un grupo de expertos de la Unión Europea, periodística y pomposamente llamados “sabios”, coordinados por Felipe González han hecho un diagnóstico muy poco tranquilizador del presente e inquietante sobre el futuro, siempre que no se tomen medidas drásticas. Los sabios apuestan por la energía nuclear, la renuncia de las jubilaciones anticipadas, el cambio de la política migratoria, de modo que se potencie una inmigración selectiva y cualificada, y el impuso de la investigación científica y tecnológica. Advierten que vivimos una época de inseguridad y que se corre un serio riesgo de que por primera vez desde el fin de la Segunda Guerra Mundial los hijos vivan peor que los padres. No entraré en el análisis de las propuestas concretas dado que yo no soy sabio, ni siquiera experto en nada, de modo que no me corresponde poner el acento en una u otra cuestión, lo que sí aplaudiré es el sentido del compromiso de quienes se enfrentan a la realidad sin paños calientes y sin ánimo de adormecernos con cuentos para niños felices. Es tan obvia la contraposición entre Felipe González y el actual presidente del gobierno español que no me la ahorraré. La irresponsabilidad, la falta de una mínima idea de Estado, el tacticismo y el electoralismo con que ha actuado y actúa Zapatero desde los orígenes de la crisis nos presentan un ejemplo de manual del político falto de la menor talla moral. Al menos así lo veo yo. No se me escapa que desde las tribunas de la derecha hace tiempo que se viene elogiando la figura de González, a quien antes se echó por tierra, en el entendimiento de que así se desgasta a nuestro hombre de León. Evidentemente es una táctica hábil y tan poco generosa y ciega como la que define a ZP, pero yo no comparto ni los principios ni las prácticas de la derecha ni tengo la intención de colocar a Felipe en ningún pedestal. González fue un hombre con muchos claroscuros, pero sus gobiernos contribuyeron a hacer una España más próspera y desarrollada. Le sobraba prepotencia y le faltaba amor a la libertad (en eso se parece a todos los gobernantes posteriores), pero no jugó alegremente con los intereses de todos por una mera conveniencia electoral. Además, Rodríguez Zapatero actúa en clave electoral desde el día posterior a las elecciones (lo mismo le ocurre, por cierto, a Rajoy). Durante mucho tiempo he pensado que Zapatero era una suerte de Pangloss, ese personaje pánfilo que pinta Voltaire y que está enfermo de optimismo infundado. Ya no estoy tan seguro, ahora empiezo a creer que José García Abad tiene razón al bautizarlo como “Maquiavelo de León”. Es una triste gracia que “con la que está cayendo” (como dicen los comentaristas especializados en el uso de tópicos) no tengamos al frente de la nave del Estado a un tipo que vea un paso más allá de la próxima cita electoral. Lo malo, me temo, es que ese tipo o tipa no existen tampoco en la oposición. Así de crudas me parecen a mí las cosas en esta hora incierta de mayo, aunque quizá tenga el día un tanto hiperbólico. Así lo espero.
[…] amigo Juan dice en su blog al respecto que “La irresponsabilidad, la falta de una mínima idea de Estado, el tacticismo y el electoralis…. Y creo que tiene razón. Pero lo de la talla moral no es lo importante par mí. Lo grave, creo, es […]
La comparación sirve también, me parece, para hacerse extensiva a Europa entera. Berlusconi o Sarkozy no son estadistas precisamente…
La clase dirigente, política… es la más empeorada de la Sociedad actual, por el convencimiento creciente y más que justificado de que disponer de una parcela de poder es disponer a tu antojo de los recursos destinados a ella. Zapatero y Rajoy son el emblema de ese bochorno, pero pajines, cospedales, pepiños, sorayas, bibianas o zaplanas son ejemplos perfectos de que en lo público se ha instalado la gente más vulgar. Como delegados de clase en primero de facultad me parecerían de una mediocridad infame
Yo creo que sí pueden existir esas personas con visión de futuro y energía para gobernar un país. Esperanza Aguirre me parece una persona con las ideas claras y la cabeza bien amueblada. Y desde el otro lado creo que Borrell podría haber sido un buen gobernante, igual que Solbes, si les hubieran dejado.
Y sobre el Maquiavelo, más vale no decir nada. Su convencimiento de que es el auténticos progresista de izquierdas y guía espiritual de Occidente está resultando ya demasiado peligrosa para el país. Un visionario autocomplaciente y ciego es lo más peligroso que hay.
Buen artículo, Juan. Un beso.
No se puede poner en el mismo nivel a las pajines y bibianas con los pepiños, cospedales, sorayas o zaplanas.
Las primeras no valdrían ni para delegadas de clase en una guardería.
Seitaridis, algunos -no yo- podrían decir que tu comentario está al borde del partidismo e incluso del sexismo. Lo que yo creo es que tu matiz -que no comparto- en caso de compartirlo tampoco merecería la pena ser mencionado, por nimio, por poca cosa…
Para gustos, según el último sondeo del CIS, el líder político con mejor nota es Durán Lleida. ¿Paradójico? No sorprende que en Cataluña este líder político sea el mejor puntuado, pero es que en el resto de España, al no crear rechazo frontal, se pone al frente de los líderes de los grandes partidos. En general la gente está harta y pasa factura a los políticos, todos suspenden. Le siguen a Durán, igualados en puntuación, Rodríguez Zapatero y Rosa Díez, el cuarto no sé y el quinto Mariano Rajoy.
Coincido con el análisis de Juan Antonio, necesitamos altura de miras. Al menos de aquellos quienes nos gobiernan. El Gobierno de España, UE, FMI. En el largo trasiego de la crisis, que no le vemos el final, vivimos días clave, momentos histéricos.
Parece que las instituciones llegan tarde a todos los fuegos y no logran hacerse con la situación. Día sí y otro también se junta lo urgente para desplazar lo importante.
Así que yo tiraré más arriba. Misteriosos y sacrosantos “Los Mercados”. Con dar al enter y salir corriendo El Palé puede hundir al dólar y lo que siga. Se puede hundir Grecia a pesar del compromiso de UE por ayudarle, seguir con Portugal, España o la Zona Euro, en un par de días. Y al tercero resucitarlo.
Habrá economistas que el día despues nos harán un excel para que nos enteremos del guión, sus pautas racionales y todo lo demás. Lo dejó escrito Keynes, no hay nada más cobarde que un millón de dólares. Sin embargo los corredores de la bolsa y los tenedores de bonos muestran ser una manada demasiado peligrosa. Después de los PIGS por entregas (papelón de los socialistas renanos), a ver la próxima dónde se libra.
Volviendo al mercado doméstico, me pregunto qué tal Durán con la manada?
Se ocupa JAT de la mala salud de Europa con el informe de los “sabios” como punto de arranque. Dejemos al tantas veces denostado ZP, pero rechazando la consideración de “Maquiavelo de León” de la que se hace eco el autor del blog. Hay una distancia sideral (para mí, al menos) entre ZP y el secretario florentino , una de las cimas intelectuales de la cultura occidental, ejemplo de servidor de la rex publica, y llegado hasta nosostros por una visión deformada y descontextualizada de su obra más popular.
En cuanto al informe de los “sabios”, hay que decir que tiempo tuvieron, cuando gobernaron, para introducir algunas de las medidas que proponen. El problema es que va a resultar bastante dificil competir con economias como la china o la india que mezclan, muy habilmente, la esclavitud con la alta tecnologia.
Se ha apuntado en anterior comentario sobre las frivolidades del los mercados y no voy a insisir más sobre el casino global.
El destino de Europa, como el de otras zonas, lo veo mal por la propia hybris del sistema: consumismo desaforado (al tiempo, se propone rebajas de sueldos y pensiones), dilapidación de recursos, irresponsabilidad en actuaciones con consecuencias catastróficas( ningún trlbunal, que se sepa, se ha ocupado de juzgar a los que han provocado la depresión en la que estamos, todo un holocausto económico que ha prvocado millones de parados que no van a encontrar empleo. Una actitud que responde a una ideologia muy clara: socializar las pérdidas y privatizar los beneficios ). De Grecia nos vino la tragedia, pero ahora Edipo no está en Colono. Está en WS, tan ciego y enloquecido como siempre, pero manejando los índices bursátiles. En el panorama político no parece que despunte la presencia de autores que puedan dar a la nueva tragedia un final justo y adecuado. Sin ánimo de hacer de Casandra catastrofista, no es solo el futuro de Europa lo que está en juego. O el sistema, que parece el único posible, se racionaliza y se desprende de sus tendencias nihilistas ( del negocio aquí y ahora , a costa de lo que sea) o el mal final de la tragedia puede incluir el hundimiento del propio teatro.
Buen artículo, José Antonio, dices de forma certera cosas que me parecen acertadas.
Este ciudadano que nos ha caído como una maldición (recordando que en democracia tenemos lo que nos merecemos) se ajusta perfectamente al síndrome de Reagan, que yo describí en una de mis primeras entradas, o que no hay peor peligro que un “burro con cartera”.
Bueno, respecto a los políticos, también nos los merecemos: serían malos delegados de curso, pero hemos dejado que lleguen a la política los peores, los demás nos hemos refugiado en otras tareas para no “mancharnos” en el ruedo político.
Como bien sabía Manrique, “cualquier tiempo pasado fue mejor…” (Ahí lo dejo. Yo soy incapaz de decirlo más breve y claro).
Por esta misma lógica, sospecho que para engrandecer la figura de ZP como estadista de gran altura sólo es necesaria una cosa, que pasen diez o quince años, que sea pasado. Cualquier interpretación del presente parece limitarse a posiciones dicotómicas maniqueas.
En estos tiempos convulsos en que parece que las palabras, como casi todo, quedan pronto caducas, me gustaría saber si pueden seguir considerándose “tacticistas y electoralistas” las últimas medidas de ZP (bajarnos el 5% el sueldo a funcionarios, congelar la mayoría de las pensiones,…). ¿Acaso irresponsables?
Saludos.
Pásate por mi blog elfogondemeg.blogspot.com, donde tengo un premio para tí. Un besazo.