Corazones en red

(Auméntanos la fe)

Jesús, en el evangelio de hoy, dice algo que no puede menos de hacernos pensar. Pensar en la fe que tenemos. Generalmente, solemos decir que tenemos mucha fe; incluso los llamados cristianos “no practicantes”, suelen decir que tienen una fe muy grande (¿). Pero el evangelio está ahí para desmentirnos. El evangelio nos pone ante nuestra reflexión, algo que podríamos llamar con palabras de anuncio televisivo, lo que sería “la prueba del algodón” en materia de fe.

Dice Jesús: “Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera:”arráncate de raíz y plántate en el mar”. Y os obedecería”. Fijaos que pequeñito es el grano de mostaza, que el mismo Jesús, en otro lugar, dice que es la más pequeña de todas las semillas.

No exige demasiado (un poquito más de fe). Y el efecto es espectacular. ¿Alguno de nosotros sería capaz de decir a una morera que se arranque de raíz y se plante en el mar, y que se cumpla?

Ya sabemos que no son palabras para tomar al pie de la letra. Pero sí quieren decir que nuestra fe, en general, es bastante débil, que fácilmente se disuelve, total o parcialmente, cuando llega la adversidad.

Ante esta situación y esta experiencia, no cabe sino gritar con los apóstoles, desde lo profundo de nuestra sinceridad: ¡Señor, auméntanos la fe! Una fe fuerte, madura, adulta, personalizada; una fe capaz de vencer las dificultades y capaz de seguir confiando cuando las circunstancias se vuelven adversas. No una fe, fruto únicamente de la tradición, una fe heredada, pero sin hacerla nuestra. No una fe para los momentos fáciles o felices. Una fe, sí, con posibles dudas, pero inquebrantable, fundada en la confianza de ese Dios que es Padre. Porque la fe se funda, principalmente, en la confianza.

Decimos, a veces, que tenemos fe, pero en realidad, es la fe la que nos tiene a nosotros; es decir, la fe es la que nos mantiene en el compromiso de la fidelidad a la voluntad de Dios, y en su Reino. Digamos muchas veces: ¡Señor, creo; pero aumenta mi fe!

                                                                               Félix González

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