El circo de la política

No quiero ser irrespetuoso con la clase política de nuestro país. Mi deber, como buen ciudadano, es, no digo amar, pero sí respetar, a aquellas personas que han sido elegidas por el pueblo, y que nos representan en el mundo social y político. Pero, no sin condiciones. Para que uno sea respetado, debe ser respetable. […]