El tío Perico

             La tarde se iba oscureciendo, ya el sol se había retirado, y la noche iba entrando muy despacio, pero trayendo el frío gélido de aquel largo invierno que obligaba a tener la chimenea encendida todo el día, y hasta bien entrada la noche; hasta que los gruesos troncos de haya se iban consumiendo, formando […]