Las cosas por su nombre
Tenemos los españoles una lengua muy rica. Suficientemente amplia como par poder decir cualquier cosa o expresar cualquier idea. No hay necesidad de acudir a otra lengua extranjera. Pero la moda (otros dirán snobismo) está haciendo que se dejen en el desván de los recuerdos palabras muy claras en español, sustituyéndolas por otra, que nadie entiende. Es el caso de la palabra “acoso”, que algunos (no pocos) de los medios quieren cambiarlo por la palabra “escrache”. ¡Señores, seamos serios, y no destrocemos nuestro idioma!
Se entiende por “escrache”a las manifestaciones que se convocan frente al domicilio o el lugar de trabajo de personajes públicos para reprobar su comportamiento en determinados asuntos políticos o sociales. ¿A eso no se llama “acoso”? Pues llamemos a las cosas por su nombre.
Pero si fea es la palabra, y poco apropiada para usar en público, mucho más fea es la acción en sí misma. ¿No hay modo de protestar sin tener ue ir a dar la tabarra al domicilio o al trabajo?
Esas personas que actúan así, se desprestigian por si mismas. Hay modos y modos. Y algunos no son de recibo, a mi parecer. ¿Ya no va a tener uno ni un rincón donde guarecerse, descansar y desarrollar su vida privada?
Todo el mundo tiene el derecho al pataleo. Pero una cosa es patalear, y otra, muy distinta, meter la pata.
La sociedad está tan crispada, que cae en el ridículo al querer manifestar su crispación.
¿Os acordáis del famoso “hombre del frac? Este buen señor, para lograr cobrar a los morosos, los acompañaba a todas partes donde se desplazaban (vestido de riguroso frac). Con lo cual avergonzaba al acreedor.
Pues me viene su recuerdo al pensar en esta gente, que sin frac, acosan descaradamente a políticos o personajes públicos.
No sé si ese método es eficaz para conseguir lo que pretenden; pero sí es, además de mal gusto, poco correcto.
Podían aprovechar su presencia ante la puerta del domicilio o de la ventana, para cantar alguna aurora, o alguna canción al modo de las tunas que cortejan a las mozas.
Cada cosa en su momento y en su sitio, No queramos resolver un conflicto con otro conflicto, o reparar una injusticia, con otra injusticia.
Félix González
Querido Padre Felix: Esto que hacen estos etarras nazis de ir a llamar a las casas de la gente de paz es muy feo. Tú sales de trabajar porque tú sí que tienes trabajo-, llegas a casa-porque tú sí que tienes casa-, y lo último que necesitas es encontrarte cuatro desgraciados protestando porque no tienen ni una cosa ni la otra. Y, al parecer, tampoco deben tener ni gato para peinar.
Después se quejan de que los denuncias a la policía y a Intereconomía. Acaso les gustaría a ellos, que les fueran a abuchear a la puerta de su propiedad? Ah, tienes razón, que no tienen propiedad. Pues es igual, les gustaría que les fueran a abuchear a la puerta del hotel? Ah, que no … Bueno, no importa, les gustaría que les fueran a abuchear, así, en general? ¿Verdad? Y claro que no, porque los gritos molestan y las malas caras dan miedo, y ya no hace falta decirlo si son de amigos de la ETA.
Si sólo te vinieran a amenazar a ti, bueno. Es que también intimidan tu pareja, tus hijos, el perro, que todavía tiene menos culpa. Qué padre se sentiría tranquilo sabiendo que sus niños, cuando llegan de la escuela, para entrar en casa no pueden bajar del coche porque unos kaleborrocas se te han instalado ante el paso del garaje? Por la noche tienen pesadillas, madre, padre, he soñado que un desahuciado entraba por cuarto de la plancha, y los tienes que poner a dormir en la habitación de atrás, la del jardín, porque se ha demostrado que las tensiones en la hogar afectan el rendimiento escolar y pueden dejar traumatizados de por vida.
Además: ¿qué te han de venir a explicar, de qué hacen o dejan de hacer los bancos, justamente a ti, que los tratas cada día? Que creen que vives en una burbuja? Como si todo esto que gritian no saliera en la prensa que te resume la secretaria cuando llegas al despacho. Como si no lo dijeran en las radios que te sintoniza el chófer. Y en la televisión que ves un rato en la cama, para conciliar el sueño después de un día intenso dedicado a los problemas reales de este país, los que afectan a todos y no unos cuantos que creen que el mundo gira alrededor de su ombligo .
Pero, claro, qué deben saber cuatro muertos de hambre del control de los diferenciales en las emisiones de deuda o del cumplimiento del déficit público? Acaso van ellos, a negociar con la Merkel? Ah, no son tan valientes? Estos sólo saben atemorizar y amenazar el político indefenso al pequeño feudo de su casa, que apenas si tiene una alarma del Prosegur. Pandilla de desagradecidos. Si no fuera por nosotros no podrían sacar ni veinte euros del cajero para el bocadillo, porque los bancos habrían quebrado. Ah, quedaros sin cajeros automáticos ya no lles hace tanta gracia, ¿verdad?
Por todo ello,que te vengan a contar la vida delante de casa es puro nazismo y no se puede tolerar. Si te tienen manía, cuando vengan las elecciones que no te voten y en paz. ¿Que no estamos en una democracia? Tiempo atrás nadie les impidió que recogieran todas las firmas que quisieron para su ILP, e incluso pudieron llevarla al congreso, y aún les dimos su minuto de gloria cuando aceptamos de votar a favor de debatir sus propuestas. ¿Qué más quieren, ahora, que encima se las aceptamos? Va, hombre, a esa gente que nunca está contenta con nada, les das un dedo y siempre te pedirán el brazo.
Amigo Juan: veo que se te da muy bien la ironía, que no deja de ser una burla disimulada. Yo no soy muy amante de esa figura retórica. Al pan, pan; y al vino, vino. No te veas obligado a contestar a mis posts, si te molestan. Lo siento.
Querido Padre Felix : veo que los años van haciendo mella en aquel joven socarron que yo conoci en los años 60. Yo tadavia conservo la ironia como un instrumento mas de la lucha de clases que aprendi del marxismo, y a proposito de lo que paso ayer en Boston quiero contarle que “bombers” es una palabra que aparece en grandes letras en los vehiculos de los bomberos catalanes, para asombro de los turistas de habla inglesa, ya que en ingles “bombers” son los terroristas que ponen bombas. Los yanquis disponen de unos aviiones no tripulados, los drones. que hace 15 dias mataron a bombazos a una docena de bebes en Afganistan. Ahora les han aplicado la ley de la Sharia, el ojo por ojo, en Boston.