Domingo XVIII del Tiempo Ordinario

(Guardaos de toda clase de codicia) A Jesús acudía mucha gente para que les ayudase en sus problemas. Generalmente eran enfermos que esperaban la curación. Seguramente acudirían a él, también, en otras necesidades. Y unas veces podía resolverlas y otras no, porque no dependían de él. Muchas cosas eran fruto de mala convivencia entre ellos; […]