Domingo XXIV del Tiempo Ordinario
Los israelitas en su largo camino por el desierto, después de la salida de Egipto, pasaron por distintas calamidades: hambre, sed, cansancio, guerras tribales… Y una de las cosas que tuvieron que padecer, en cierto momento, era la picadura de las serpientes. Entonces acudieron una vez más a Moisés a quejarse. Y Moisés mandó hacer una serpiente de bronce, y ponerla en un palo alto. Todos los picados por las serpientes, se curaban al mirar la serpiente de bronce.
Jesús, en su conversación con el judío Nicodemo, le dice, refiriéndose a su muerte en la cruz: “Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del Hombre, para que todo el que cree en él, tenga vida eterna”.
Y añade algo muy importante, que no debiéramos olvidar nunca: “Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él”.
La fiesta de la Santa Cruz, que celebramos hoy, quiere recordarnos la importancia que tiene en la vida de un cristiano, este signo. A lo largo del día, solemos hacer varias veces el signo de la cruz; y la cruz está presente en nuestras casas, colgada en nuestros pechos, a veces hasta públicamente en los caminos, en los cementerios. ¡En tantos sitios!
Pero además, la vida nos aporta una serie de cruces, que no son de madera, sino que afectan a nuestras personas, o a la de nuestros seres queridos: pobreza, enfermedades, tragedias humanas de todo tipo, dolor, muerte…
Esas son las verdaderas cruces a las que el Señor se refiere cuando dice: “el que quiera ser mi discípulo que cargue con su cruz y me siga”.
Cuesta cargar con la cruz, pero también a Cristo le costó, y no la rehuyó. Si unimos nuestra cruz a la de Jesús, nos será más fácil cargar con ella. Que el mismo Jesús nos dé su fuerza y su decisión para seguirle, aunque sea llevando la cruz, como un cirineo.
Félix González
The 24th Sunday in Ordinary Time is a Christian liturgical celebration that falls on the 4th Sunday of September. It is a time for reflection on forgiveness and reconciliation, as the Gospel reading for this day focuses on the importance of forgiveness and the restoration of relationships.