Lección de vida en la muerte

La muerte de Ángel

BarbañoAcaba de morir Ángel, un padre joven de 38 años, militar de profesión. Ha visto a una chica y un chico, con problemas entre ramajos, que estaban haciendo piragüismo  en el azud del Guadiana; se ha lanzado a salvarlos y ha perdido su vida por querer ayudarles. Varios infartos han acabado con él, la chica está en coma en UCI, el otro chico bien. Un gesto de vida última¡ Yo iba a celebrar la Eucaristía a la residencia de la Granadilla, allí están los ancianos. Oí sirenas y coches de Policía que a gran velocidad me adelantaron antes de llegar a mi destino, que está junto al Guadiana. Tendiendo mano al pobreHe pensado en algún problema de violencia, ni se me ocurría este hecho, aunque pensé que ya lo vería en el periódico. Lo he comentado en la misa con ellos, donde pedíamos por la paz. Pero lo que menos podía imaginar era que mientras yo estaba celebrando del memorial de Jesús, alguien como Ángel estaba cogiendo su vida y la estaba arriesgando y entregando por una chica que veía en apuros, porque su piragüa se la estaba llevando el agua con una fuerza y un remolino inesperado. Ahora que llego a casa y lo leo, y me informo. Descubro una lección de vida en su muerte, y una clave para este momento que nos rodea de personas que se ahogan en una crisis inhumana y  injusta, donde los remolinos se llevan a tanta gente. Desde él se me hace vivo y urgente esta reflexión que escribía hace unos días, en la semana santa, sobre dejarse afectar y actuar con compasión:

melilla-valla-negrito-efe-La realidad  conflictiva de pasión viviente y de sufrimiento social reclama  toma de postura por parte de cada ciudadano y de la sociedad en su conjunto. El cristianismo tiene una filosofía válida para humanismos concienciados; él presenta la necesidad de desarrollar la dimensión sociocaritativa de nuestro ser humano. Son los caminos  de la misericordia  los verdaderos caminos de la fe y el humanismo en medio del mundo, de ahí nacen las clásicas obras de misericordia.  El momento actual de crisis  tanto a nivel  económico,  como  humano, social, cultural y espiritual, nos llama a profundizar y buscar una relectura de esas obras de misericordia que atiendan el sufrimiento, la angustia y el dolor de los hombres de hoy que llamamos estampas de pasión. Ahora bien,  la compasión, la misericordia no se identifica con los actos, sino que nace de una actitud fundante, de la capacidad de sentir con los otros y desde ellos. De alguna manera la misericordia llega hasta donde llega nuestro dolor por los demás.

desahucios2Hoy, en medio de una cultura indolora que favorece la indiferencia, estamos llamados a proponer una cultura  afectada, un saber y un sentir  espiritual encarnado. Necesitamos romper el círculo de la seguridad  que nos aísla de la verdad y del sentimiento de nuestros hermanos, llevándonos a un individualismo que obstaculiza el desarrollo de la misericordia en nuestro corazón. Sabemos  que la salvación y la realización personal no llegan por la seguridad, sino por el riesgo de la entrega, como dice la máxima evangélica: “El que quiera ganar su vida la perderá y el que esté dispuesto a perderla la ganará”. Cuando el criterio es la seguridad, nos buscamos a nosotros mismos y nos encerramos,  poniendo límites a los de fuera y, sin darnos cuenta, a nosotros mismos.  Para el humanismo cristiano  la persona se realiza y se enriquece cuando se abre y arriesga sin miedo para realizar los deseos y sueños más profundos y comprometidos. La clave del riesgo está en darse: “Cogió el pan lo partió y se lo dio diciendo: tomad, comed, esto es mi cuerpo que será entregado…” ¿Y qué podemos hacer como ciudadanos – y como cristianos- para vivir la compasión?

IMG_4487Hay pasos sencillos y fundamentales que hoy se nos reclaman: aprender a leer  con profundidad y en comunidad la vida de cada día, los gozos y sufrimientos propios y ajenos que se dan en el  mundo, para dejarnos  afectar por ellos desde dentro. Trabajar el conocimiento  de las causas y las consecuencias de la crisis en la que estamos, tanto a nivel  individual como social y estructural, para estar informados y poder entrar activamente  con respuestas  personales y comunitarias. Acercarnos personal y comunitariamente a las personas que están en situación de dolor y sufrimiento, sea por la causa que sea, para establecer lazos de cercanía, vecindad y familiaridad con ellos. Tomar decisiones de riesgo y compromiso en lo pequeño de cada día para hacernos cargo de la realidad y aportar lo que somos y tenemos en el ámbito de lo público. Se hace necesario, en orden a cultivarnos  en la misericordia activa y fecunda, el caminar en comunidad, desde lo pequeño, en grupos de vida  y de compromiso, tanto a nivel religioso, como popular, asociativo, en redes, que nos ayuden a caminar en esta dirección del discernimiento solidario y transformador de nuestra sociedad y su cultura, es decir, el modo de pensar, sentir y actuar. Juntos hemos de buscar y diseñar estrategias, viables y posibles, que de un modo personal y comunitario respondan a las estampas de pasión que nos rodean y que están al alcance de nuestras manos. El sentido de la vida y la esperanza, en medio de la crisis, se anuncia y se hace presente en cada gesto de misericordia que muestra que otro mundo, el de la compasión, es realmente posible.

Ángel, intercede por nosotros¡

José Moreno Losada.

 

31 Responses to “Lección de vida en la muerte”

  1. Amigo Pepe: A raíz de tu comentario en facebook, me he puesto en contacto con compañeros y, efectivamente, el militar era Ángel Vázquez, destinado en el Regimiento de Infantería “Saboya” 6, con guarnición en la base “General Menacho”, en Bótoa. Deja viuda y una hija de once años. Descanse en paz.

  2. Mi más sentido pésame a la familia y al Club de Piraguaísmo de Badajoz

  3. No le conozco en persona, sólo a través de Maorí Jose. Pero quiero darle las gracias por sus oraciones en nombre de la gran familia del piragüismo y, me atrevo, en la de la suya. Sé que Ángel está en un lugar mejor. Le pido que siga orando por Isabel. Y gracias, muchas gracias

  4. Descanse en paz.Dios de seguro ya le tendrá en sus manos,,,El Señor consuele y ayude a su familia…

  5. Él lo dibuja todo con colores de esperanza en el sentir diario.. Con estos gestos tan grandes, qué pequeña me siento…

  6. Dios lo bendiga,gozando de su presencia.

  7. Pepe, qué sabiduría, mezclada con esperanza!!! Gracias por compartir con nosotros tanto. Un abrazo

  8. Pepe, precioso tu homenaje a Ángel. D.E.P.

  9. muy bonita tu reflexion

  10. Ha sido un acto de verdadera valentía y entrega a los demás, esta situación nos lleva a reflexionar sobre nuestra vida diaria, ese egocentrismo en el que vivimos y nos cuesta salir de él.
    Si cada día individualmente cambiáramos 15 minutos de nuestra vida por y para entrega a los demás, el mundo sufriría un cambio enorme.
    Extrapolándolo a la vida política, los totalitarismos que aún siguen vivos, amenazan el colectivo mundial, por su individualismo y egocentrismo apoyados por armas nucleares, si pensaran esos 15 minutos al día e hicieran gestos de entrega a los demás, las amenazas mundiales se convertirían en simples roces de la convivencia diaria.
    Hay que reflexionar sobre ello.
    Descanse en Paz.

  11. La mañana del Domingo, yo también escuché y ví desde mi ventana sirenas, bomberos, ambulancias… no podía ni imaginar lo que había sucedido. A medida que pasó la mañana fui leyendo las noticias y me enteré entonces de lo sucedido.
    Lo que ha hecho Ángel, ha sido un acto de valentía, de servicio a los demás. Seguro que al hacer eso sólo pensó en salvar la vida de aquellos jóvenes y sin pararse a pensar quizás en su vida misma.
    Lo que era una bonita mañana soleada, para muchos se convirtió en la peor de sus vidas…

    Descansa en Paz Ángel. Y mi máximo apoyo y cariño a su familia.

    Gloria.

  12. Mi más sincero pésame antes de todo a la familia de Ángel, un hombre lleno de generosidad sin lugar a duda.
    En la clase de ayer veíamos algunos ejemplos de personas que arriesgan, que tienen un DON, que son generosas, pues sin duda Ángel tiene todas estas características. Ha sido capaz de arriesgar su vida por los demás, siendo generoso pues. Es una historia sobrecogedora, pero llena de valor, coraje y sobre todo es una historia que nos enriquece como seres humanos, ya que muchas veces “pasamos de largo” ante los problemas de los demás porque creemos que “ya tenemos suficientes con los nuestros”, pues bien Ángel daba su vida sin pensárselo por salvar a estas dos personas, es una gran lección de GENEROSIDAD, DE DEJARSE AFECTAR, DE ARRIESGAR…

  13. Yo entreno al fútbol los lunes y miercoles a unos chavales de mi colegio . Y uno de ellos llegó el lunes por la tarde al entrenamiento y me dijo que su vecino habia muerto por intentar salvar a 2 muchachos que necesitaban ayuda en el río.
    Yo me quede extrañado y un rato pensando en lo que me habia dicho, no daba crédito y no fue hasta por la noche que llegue a mi casa y me di cuenta del eco de la noticia.

    No siempre el que arriesga gana. Así sucedio con Ángel que actuó como la mayoria hubiese actuado por ayudar a 2 personas que necesitaba esa ayuda. Él si lo hizo y tuvo un final desagradable. El tuvo ese coraje y esa valentia para intentar salvar a los que necesitaban ayuda.
    Mi más sincero pésame a la familia que tiene que estar pasandolo muy mal, pero con el tiempo estará orgulloso del gesto que hizo, aunque el dolor que siente esa familia es tan grande que nunca sabra ni sentira ese orgullo.

    Allá donde estes Ángel espero que sepas que has hecho una gran labor y que no tuvistes tu recompensa y que la vida ha sido injusta con él.

  14. Cuando me enteré de la noticia en el periódico, la leí, y a medida que iba leyendo, iba sintiendo en el cuerpo distintas emociones y sensaciones.
    Cuando lees o ves el gesto de esas personas heroicas, te das cuenta cada vez más del sentido de la vida, de las cosas que tienes, e incluso de lo egoístas que llegamos a ser.
    Cuando iba de camino a clases pensando sobre ello, me di cuenta de la situación de la mujer e hija de Ángel, y pensé egoistamente que yo no querría que mi padre hubiera sido ese, a pesar de que yo si lo hubiera hecho. Supongo que hay veces que valoramos más la vida de los que más queremos que la nuestra propia.
    Mi más sincero pésame a la familia.

  15. El domingo por la mañana nada mas despertarme me imaginé que algo malo estaba pasando, estaba en casa de una amiga cuando escuche las ambulancias una y otra vez, no me imaginaba que algo tan grave estaba ocurriendo, que descanse en paz, pueden estar muy orgullosos toda su familia, amigos y conocidos de Angel, porque seguro que no se planteó ni un solo segundo arriesgar su vida para salvar el resto, si fuese su hija me hubiera dolido mucho que la arriesgase porque lo hubiese perdido pero es un acto que demuestra que es una persona muy grande

  16. El domingo viajé a Sevilla para recoger a una amiga que estaba de Erasmus y me dieron la sorpresa al llegar allí. Cuando llegué a Badajoz a mediodia estuve en el hospital donde trabaja mi padre para verlo pero había salido a un aviso así que hasta el día siguiente no supe la noticia de su propia voz.
    Me quedé asombrada de lo que había sucedido. Al principio te impacta, te alarma. Si te paras a pensarlo te das cuenta de la valentía que tuvo Ángel ante esa situación inesperada. Personalmente pienso que no hubiese sido capaz de responder así porque me quedaría paralizada, pero él no se lo pensó dos veces se lanzó al agua a ayudar a esas personas.
    Realmente dio su vida por los demás y lo demostró de una manera increible, el empeño que puso en ello por desgracia no le salió bien. Lo más importante de todo esto es darnos cuenta de que muchas veces no ayudamos a los demás cuando lo necesitan pero si precisamos de ayuda cuando lo necesitamos, seguimos siendo bastante egocéntricos con respecto a la sociedad. Este chico nos ha demostrado que hay que mostrar coraje y ayudar a los demás, en definitiva nos ha dado una lección de vida.
    Para terminar darle mi más sentido pésame a la familia por su pérdida.

  17. El caso de Ángel es un ejemplo a seguir. Creo que pocas personas hubieran reaccionado como lo hizo él, sin embargo, no se lo pensó dos veces y se lanzó a ayudarles. La situación actual de nuestra sociedad pide a gritos que abramos los ojos y sepamos actuar ante las dificultades y necesidades tanto nuestras como de los demás. Estamos tan inmersos en nuestro egocentrismo que cuando alguien está en apuros no somos capaces de reaccionar, sino que pasamos de largo pensando que ya otros lo ayudarán.
    Lo que ha hecho Ángel es un claro ejemplo de dejarse afectar, de compromiso, de valentía, de arriesgar. No pensó en ningún momento que pudiera perder su vida y arriesgó por los demás. Esto es lo que deberíamos hacer cada uno de nosotros, puesto que si todos nos dejásemos afectar y actuáramos ante las necesidades de los demás, el mundo cambiaría.

  18. No paramos de ver y oír en los medios de comunicación noticias de asesinatos, atentados, tiroteos, desahucios, robos, corrupción… ¿Dónde están los valores? ¿ qué valor tienen las personas? Vivimos en un mundo totalmente deshumanizado, sin corazón, sumidos en el más profundo de los egoísmos… igual por esto nos sorprenden tanto este tipo de noticias. No conocemos la vida de Ángel, ni el tipo de persona que fue, pero con su heroica acción demostró que no era indiferente, que las cosas que pasaban a su alrededor le marcaban y por eso hizo lo que hizo. Como futura maestra creo que nuestro papel en la escuela no debe centrarse tanto en conseguir unos objetivos o llegar a un nivel, sino formar “personitas” humanas, con corazón, que sean capaces de salir de la burbuja de seguridad en la que estamos metidos, traspasar el mío-yo-para mí y ver un poco más allá, porque muy cerca de nosotros seguro que habrá alguien que necesite ayuda, no hace falta salvar vidas, vale con escuchar, apoyar o dar la mano a quien lo necesite.

  19. El domingo no paraba de sonar ambulancias, bomberos… sabíamos que algo estaba pasando, pero creo que a nadie se le pasaba por la cabeza que un hombre, Ángel, había muerto por ayudar a una pareja que estaba en peligro. Ángel nos ha dado a todos una gran lección, una lección de generosidad, arriesgar, dejarse afectar… No dudó en ningún momento de ir a ayudar a esa pareja que se había caído al Guadiana. Más tarde supimos que Ángel murió, que el muchacho estaba bien y que la muchacha estaba muy mal. Hace unos días la muchacha a fallecido.
    Mi más sentido pésame a los familiares de los fallecidos.

  20. Con su acción, Ángel nos ha dado una verdadera lección de valentía, de ayuda al prójimo…. Hoy en día hay pocas personas que sean capaces de arriesgar tanto por otras personas y más cuando no las conoce de nada.

    La mayoría de las veces vamos tan rápido por la vida que no apreciamos verdaderamente lo que tenemos ni quienes somos. Lamentablemente es en situaciones como estas cuando paramos un poco, pensamos y nos ponemos en el lugar del otro.

  21. La verdad, es que después de leer esto no se muy bien que decir, lo que este hombre ha hecho es algo increíble, dar su vida por dos personas desconocidas, más que dar su vida, entregar su vida y reaccionar de la manera que lo hizo e involucrarse. Es una pena que tenga un triste final para él y su familia. Cómo anteriormente comenta Marta, a veces somos muy egoístas y yo al igual que ella pienso, que tampoco me gustaría que hubiese sido mi padre, que preferiría perder la vida yo. Cuando pasan estas cosas es cuando realmente piensas la cantidad de preocupaciones que tenemos sin importancia y lo que realmente es importante en esta vida.
    Mi más sentido pésame a la familia.

  22. Ha sido una terrible noticia para todos los vecinos de Badajoz, pero a la vez una gran lección de generosidad. Ha ocurrido ya hace unas semanas y todavía sigo meditando sobre ello, si yo viera a alguien en peligro ¿sería capaz de reaccionar igual que Ángel? Todavía no lo sé porque, agraciadamente, nunca me he tenido que ver en esa situación.
    Me ha parecido un acto increíble, de superación, de valentía, de generosidad y de muchísimos más adjetivos tan grandes que no hay palabras para describirlos. Lo más importante que tenemos cada uno de nosotros es nuestra propia vida y arriesgarla, teniendo además una mujer y una hija como he leído en otros comentarios, para salvar la vida de otras personas es un verdadero valor que seguramente pocas personas tienen.
    En esta época de degradación de lo humano y de pérdida de valores (positivos, claro), todavía hay gente que, como Ángel, nos enseñan que no debemos olvidarnos de lo que somos y que por encima de todo debemos olvidarnos del egoísmo que nos está corrompiendo. No hace falta que tengamos que salvar la vida de nadie, en el día a día podemos hacer pequeños gestos para ayudar a todos aquellos que nos rodean.
    Muchas gracias Ángel.

  23. Ángel, así se llama la persona que nos recuerda que todavía hay gente que piensa en los demás antes que en él mismo. Un acto de valentía y fuerza que le hizo tirarse a por ellos sin pensar en que le podía pasar a él. Por cosas como estas nos damos cuenta que hay gente que tiene un don, como hablábamos en clase, que descubren que sirven para algo más que para pensar en ellos mismo y pensar antes en los demás.
    Descanse en paz.

  24. Me enteré de la trágica noticia, la tarde del domingo, cuando estaba sentada en el sillón con mi madre mientras ella leía el periódico.
    Ángel demostró ser una persona con unos valores admirables y un corazón muy grande. Él arriesgó su vida para salvar a aquellos jóvenes, realizando un acto de valentía y entrega a los demás.
    Este tipo de noticia nos hace darnos cuenta que debemos pensar menos en uno mismo y ayudar a todas las personas que nos rodean, que quizás, son muchos los que nos necesitan.
    Muchas gracias Ángel.

  25. No deja de sorprenderme que aún queden personas con la capacidad de dar su vida por otros, en un acto tan valiente y con tan pocas posibilidades de sobrevivir a la fuerza de la naturaleza. Debe ser difícil decidir en una situación tan límite como la de aquel día, sabiendo que tus probabilidades de éxitos son muy bajas. Es un acto de heroicidad y valentía, que desgraciadamente nunca será recompensado. Se lo jugo todo, a pesar de tener familia e hijos. Como madre y esposa pienso en el sufrimiento de su familia pero también seguro que están convencidos que lo hizo porque tenía fe en salvarlos. Mi más sentido pésame, d.e.p.

  26. Gracias a este hombre, podemos ver que hay muchas personas que todavía piensan en los demás saliendo de ese egocentrismo en el que estamos inmersos muchas veces. No estaría mal pararnos un ratito a mirar a nuestro alrededor, y ver como nuestros problemas quizás no lo son tanto en comparación con otra gente, y no pensar sólo en mí, y en que lo mío es más importante que el de los demás.
    Qué bien se siente una persona cuando sabe que ha hecho algo bueno por alguien o ha ayudado a alguien con algo, y que pena que hay gente en este mundo que no ha experimentado esa sensación nunca.
    Como dice el dicho: “siempre se va la buena gente”
    Mi más sentido pésame para toda su familia.
    Descanse en paz.

  27. Aunque da muchísima pena por el chico que dio su vida, me parece un acto muy noble, en una sociedad que, de alguna manera, está perdiéndose en el individualismo. Ángel fue capaz de pensar en otros antes que en sí mismo, de luchar poniendo su propia vida en peligro y es honorable.
    Este caso es un acto demasiado extremo, pero creo que nos hace falta un poco de empatía, ponernos en el lugar de los demás, pensar un poco más en nuestros compañeros, amigos, familiares, e incluso desconocidos que tenemos alrededor… a la hora de actuar; ya que de esta manera, la sociedad poco a poco iría engrandeciéndose.
    Es una pena que tengan que pasar estas cosas para hacernos pensar en lo que tenemos, y en lo poco que damos por los demás.

  28. Al leer la noticia en el periódico no salía de mi asombro. No conocí personalmente a Ángel, aunque sí que es compañero de profesión, razón por la que creo que me afectó aún más.
    A nosotros, los militares, lejos de lo que pueda pensarse, nos enseñan a defender al débil y a ayudar al prójimo aún a costa de nuestra propia vida.
    Yo creo que Ángel ese día no fue consciente de lo que hacía, simplemente vio que alguien estaba en apuros y sin pensarlo dos veces hizo lo que le habían enseñado: dar su vida por los otros.
    No creo en ningún momento que él buscase reconocimiento ni sentirse héroe, como he leído en algunas noticias, simplemente sintió la necesidad de ayudar a quien lo necesitaba.
    No sé cómo hubiese reaccionado yo en tales circunstancias, porque lo que Ángel hizo no es algo que se piense y se planee, es algo que sale del corazón y que te impulsa a actuar de determinada manera.
    Por desgracia son varios los amigos y compañeros de profesión que yo también he perdido por lo que sé que para su familia y compañeros estos momentos son muy duros, que nunca lo van a olvidar pero el tiempo es la mejor medicina y se aprende a vivir con los recuerdos que nos dejaron.
    Su patrona es la Virgen de la Inmaculada Concepción quien seguro ya tiene a Ángel a su lado. Descanse en Paz.

  29. La muerte de este hombre en el río fue una noticia conmovedora. Fue un acto de valentía y de dar la vida por el prójimo que hoy en día ese valor no todo el mundo lo tiene desarrollado en su persona. Provoca felicidad el saber que en los tiempos que corren aún queda gente buena que da la vida si es necesario por salvar a otra persona, a las pruebas nos podemos remitir. Es difícil pensar así porque la mayoría de la gente sólo busca su propio bien, satisfacción y felicidad y no todo el mundo está dispuesto a morir por nadie y mucho menos dejar una familia rota por intentar salvar una persona. Así fue como éste hombre lo hizo, al ver el peligro que corrían las otras dos personas en el río sin pensarlo dos veces se lanzó al agua sin ni si quiera reparar en el daño que pudiera causarle a él tirarse al agua. Es un acto en el que están presentes las claves de dejarse afectar por los demás, arriesgar tu vida por otros, el vivir para la comunidad… un acto que acabó con su muerte pero en el que está presente el Reino de Dios y este es uno de los caminos que nos llevan a vivir en él si actuamos así, como Dios quiere que seamos.

  30. Han pasado ya unos meses desde que se produjo este fatal accidente donde perdió la vida Ángel, sin duda alguna una gran persona que no se pensó en ningún momento lanzarse al río para salvar la vida de aquella pareja que estaba en apuros, no pensó que en esa acción podría jugarse su vida misma y aun así se lanzó sin miedos a pesar de que perdió su vida logró salvar la vida de aquella pareja, aunque ha día de hoy la mujer tras luchar por su vida en el hospital murió.
    Con esta acción nos paramos a pensar que no todo el mundo arriesgaría su vida por salvar la de los demás y que podemos ver que hay muy pocas personas como Ángel un ejemplo puro de cómo dejarse afectar, de generosidad y de todo aquello que nos podamos imaginar.

  31. Al leer esta noticia he sentido una gran admiración por Ángel, y a la vez una gran pena por la pérdida de una persona que deja a una familia y una vida. En la sociedad en la que vivimos hoy en día es muy difícil encontrar personas como él, que arriesgan su vida, sin pensar en lo que ello conlleva, por hacer feliz a los demás.
    Mi reflexión al terminar de leerla ha sido, que deberíamos mejorar y superar el egoísmo, que nos está entorpeciendo a ser felices y a compartir, realizando pequeños gestos y poniéndonos en el lugar de los demás antes de actuar.