La muerte como fuente de vida

Y la Providencia hizo posible el encuentro en una encrucijada del camino de la vida. Fueron instantes de luz y esperanza…

Comienzo este aniversario de la marcha física de José Andrés con esta expresión que me transmitió mi querido amigo Francisco Castro, porque si me limito al significado de los números, puedo interpretar muchas cosas, pero otras se me escapan…

Decir once, como decir doce, trece, catorce…y qué mas le da al resto del mundo? Quién puede entender de qué y para qué numero, cuento o hago sumas.
Once, el número once, según algunos, significa maestro de camino de vida.
Once es también dos y tienen la fuerza para terminar lo que se empieza.
Once es también un número para formar asociaciones … trabajar y jugar bien con otros.
El número 11 se refiere también en el camino de la vida a la iluminación espiritual. Pues aquí me quedo, en este once, como un carrusel que no se detiene, porque siempre sigue, siempre tira hacia delante, porque es un continuo crecer desde la luz y la esperanza que deja constantemente la presencia ausente de mi pequeño.

Hoy es la suma de todos estos años sin ti. Once.
Hoy es el resultado de muchas noches, pero también muchos días, en los que puedo contabilizar muchas lágrimas convertidas en vida, y donde todo el tiempo me parece poco, para poder seguir expandiendo tus enseñanzas de siete meses, a través de mis alas siempre dispuestas a volar.

Hoy me atrapa el silencio. Los sueños. La noria de la vida que gira sin parar.
Hoy me atrapa el susurro del aire, el olor a invierno entre el sol, la primavera habitable en mi al pensarte, sintiéndote cada segundo de mi existencia.

Hoy solo quiero dar gracias José Andrés, porque esta vida regalada cobra todo el sentido en querer ser y crecer.
Hoy solo quiero compartir mi deseo de dar, con que otros se contagien conmigo,
a través de ti para la donación de órganos.
Hoy solo quiero abrir mis ojos y seguir diciendo la mundo te quieros al aire, porque quiero amar y ser amada.
Hoy solo quiero seguir respirando al compás del no calendario, y ser útil a mi misma y al universo, que me acoge entre sus amaneceres y atardeceres ofreciéndome vida y mucha esperanza, esperanzada…porque vivir es solo vivir, amar, dar…y luego seguir amando y dando… como me devuelve la vida al pensarte, y al saber que estás a través de tantos que van llegando, y escriben las páginas de este mundo de AMOR que juntos construimos en el no espacio y no tiempo.

Gracias porque es simplemente lo que arroja en este “once” mi corazón al mundo, a mi gente, a mis conocidos, a mis todos, con mi familia al frente,mis padres, mi hermana Ana, y mi hogar con Andrés tu padre y tus hermanos…
Gracias por permitirme ser libertad entre tanto apego, querer seguir volando a pesar de no ser pájaro, pero si querer seguir creciendo y aprendiendo como Juan Salvador Gaviota. Y qué mas da cómo, siempre sumando, con el significado de los números, de la vida, de la separación física y el encuentro espiritual contigo.
Siempre gracias

Pd. Hoy, un día mas besaré a tus hermanos, Álvaro y Gabriel, y en sus besos irá el tuyo, mi caricia del cielo hacia ellos, mi mejilla sobre las suyas para ti…
Te quiere, mamá

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