Adios a un dominico auténtico
UN DOMINICO AUTÉNTICO
Adios al Padre Pedro María Grijalvo
La orden de los predicadores de Santo Domingo, los dominicos, no suelen abrir casas en España actualmente, más bien las cierran por falta de vocaciones. Sin embargo no fue así hace algo más de una década cuando D. Ciriaco, obispo de Cáceres entonces, pidió que se hicieran cargo de la pastoral universitaria en su diócesis y de una parroquia en la ciudad, la orden decidió abrir un convento en Extremadura, y envió una comunidad de frailes dominicos entre cuyos miembros estaba Pedro María.
Hoy que vuelvo de Burgos, tras haber concelebrado en la eucaristía de despedida de su vida, en sus exequias, recuerdo lo que ha supuesto esta persona en la universidad de Extremadura y especialmente en el campus de Cáceres. Llegó en silencio, sin ningún poder ni privilegio y se puso en contacto con los que llevábamos algunos años en este trabajo pastoral de presencia en la UEx. Tomo asiento en la facultad de filosofía y letras y desde los pasillos y los despachos comenzó a conocer y contactar con los miembros de la comunidad universitaria para intentar servirlos desde su sencillez y humildad. Venía de trabajar muchos años en la enseñanza en bachillerato en Valladolid y era muy reconocido sobre todo en sus dotes de técnico en deportes y atletismo, ahora le tocaba un trabajo totalmente nuevo y había que comenzar desde abajo aprendiendo lo más sencillo, entrar en contacto con la vida de la universidad y de las personas que la forman.
Poco a poco se fue haciendo maestro de vida , sin ser profesor, en su quehacer de capellán; observaba las necesidades y se acercaba a las personas para mostrar su apoyo y dedicación, especialmente su escucha. Desde ahí se ha hecho familiar para montones de alumnos de las distintas facultades, para profesores en sus itinerarios curriculares y problemáticas familiares, para el personal de administración y servicio. Ha sido buen consiliario de los jóvenes estudiantes católicos (JEC), con ellos ha vivido y se ha entregado al máximo, reuniones a millares, jornadas de formación, campamentos, celebración de la eucaristía para universitarios en la capilla de la plaza de Cáceres, cercanía a las residencias estudiantiles, misas por los difuntos, celebraciones de los patronos, encuentros ordinarios con profesores universitarios y su obispo, cursos de perfeccionamiento, de biblia en diálogo con otros saberes…
No buscó privilegio alguno ni reconocimiento personal, se ha ido con el mismo silencio que llegó, ha estado acercándose a su despacho en el trayecto de la enfermedad que le ha comido la vida, y eso no le ha impedido estar con el corazón en todo lo que hemos emprendido; recordamos sus palabras de ánimo y de esperanza en las jornadas de formación en Julio, dando testimonio de la vivencia cristiana y esperanzada de su enfermedad, agradecido a tope.
Pedro ha sido padre de los estudiantes, hermano de los profesores, compañero de los trabajadores en la universidad, ha gozado y sufrido con todos, todo en el anonimato y la sencillez más absoluta. Ha sido un dominico fiel y creativo en un deseo de servir y hacer la universidad según el reino de Dios que busca la justicia y la fraternidad desde el estudio y la investigación; ha sido un fiel discípulo del maestro Tomás de Aquino. Que Dios lo tenga en la Gloria, y yo desde la tristeza y el dolor del compañero que ha quedado solo, me acojo a la fe en la resurrección que compartí con él y cuento con su ayuda diaria y fuerte desde el cielo. ¡Ayúdanos Pedro a hacer una verdadera pastoral universitaria, la que soñábamos juntos¡
(En la foto, Pedro es el segundo por la derecha )
Con pena nos quedamos aquellos que le conocimos. Intentaremos aprender de él en nuestro servicio en la Universidad.
Con el corazón atrapado por la tristeza y, sin embatgo, me sale del corazón una plegaria agradecida por la entrega generosa y cálida de Pedro Grijalvo a la Pastoral Universitaria y a tantas personas como hemos tenido el privilegio de recibir su cariño, sus palabras y su testimonio callado y auténtico. Descanse en paz y honremos su memoria.
“Llegó con tres heridas:
la del amor,
la de la muerte,
la de la vida.
Con tres heridas viene:
la de la vida,
la del amor,
la de la muerte.
Con tres heridas yo:
la de la vida,
la de la muerte,
la del amor”.
Me permito copiar a Miguel Hernández para expresar los entimientos de los Consiliarios de los Mtos. Apsotólicos de Acción Católica de Extremadura. Los sentimientos del que contempla al que fue herido por la muerte, porque ya el Amor había herido su vida en favor de nuestra tierra y de nuestra gente. Su vida hirió nuestras vidas en tanta entrega y vida compartida con él en la preocupación porque el Reino haga posible la utopía en la Extremadura de nuestros amores. Seguimos en comunión contigo, hermano Pedro.
Gracias, Pedro, por trasnsmitir la humildad y el tesón por volcarte por los demás; si algo te echaba en falta era la enorme riqueza en saber y experiencia que tenías y lo poco que la expresabas, fiel a tu idea de escuchar y trabajar más que hablar.
‘bienaventurados los sencillos, los pobres de espíritu…’
Buen día, Pepe:
Que tristeza me ha dado la muerte de Pedro. Qué sorpresas tan agradable te da la
vida al poder conocer personas así, humilde, cercano,optimista…buscando hacer
grande al prójimo…y sobretodo la GENEROSIDAD en su sentido más amplio y profundo.
Me sorprendió su visión del deporte al que dedicó parte de su vida, como superación
de la persona, aceptación de las limitaciones, entreno en equipo, intercambio de
experiencias de entreno…con qué ternura, serenidad y sentido común hablaba de su
vida: alegrias, preocupaciones, su familia, especialmente sus padres…qué palabras
tan bonitas y cuánto cariño la ultima vez que hablé con él con respecto a la boda, a
pesar de la dificultad que tenía para poder hablar…era facil quererle…
Descanse en paz
Mi querido Pedro,
Mi gran compañero,sacerdote y amigo,
el que me enseñó que Jesús hoy sigue vivo, que nos ama con locura, que se hace más grande en la naturaleza, especialmente en aquellas piedras de Gredos donde compartimos tanta Vida.
Y en su despacho…refugio para encontrar Esperanza y Alegría,
¿Te acuerdas Pedro?
con Él me enseñaste el sentido de la Vida.
(“Gracias por hacer de la Universidad un espacio de Dios”)
Un Padrenuestro.
Tiempecito para la oración y el recuerdo..es lo único que ahora le puedo ofrecer…
¡Gracias a todos y que Dios os bendiga!
Montaña
El 23 de enero a las 6 en la Parroquia de La Mejostilla en Cáceres habrá una Celebración.
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