“un grupo de curas…”(1)

arciprestazgo 3¿De qué hablamos los curas? 

Pronto, el próximo sábado nos volveremos a reunir, y fue en diciembre cuando nos encontrábamos  para analizar,  por deseo e inquietud personal, cosas del mundo, de la vida diaria, de la Iglesia, de nuestras vidas ministeriales; en el horizonte está la máxima evangélica de “a vino nuevo, odres nuevos”. Aquí está pasando algo nuevo  y no podemos cerrar los ojos, por razón de verdadera fidelidad.

Comenzamos la reflexión con un texto que nos planteaba cuestiones fundamentales de la cultura actual y de su incidencia en la sociedad y en la iglesia. Queríamos contrastar nuestras realidades personales, parroquiales, etc… con la visión presentada y veíamos los SIGNOS que nos hacen vivir esa realidad cambiante tanto a nivel cultural, social, político, económico, como religioso y eclesial. Reflexionamos desde nuestro AQUÍ Y AHORA cotidiano y diario:

Comenzamos el diálogo, desde  lo trabajado previamente, con un interrogante: ¿Qué nos está pasando en esta Iglesia  española en la que se celebraron los congresos de parroquia evangelizadora, o de evangelización, incluso un gran concilio? Porque los  datos y análisis del  trabajo previo  ya se conocían entonces y ahora, en estos momentos, los datos están incluso peor. Parece que no somos capaces de dar pasos en la dirección de los postulados  y claves pastorales que nos planteamos una y mil veces.

iglesia chelesEs muy posible que sigamos partiendo de una afirmación: ¡ aún la sociedad es religiosa! Y podrá ser posible mientras exista la afirmación de Nietzsche “Dios ha muerto, lo hemos matado”, peor será cuando se afirme “Dios ha muerto, lo hemos enterrado”. El reto está en que no hay respuestas claras al momento actual,  porque es muy difícil. Es complicado encontrar una respuesta articulada en esta realidad tan nueva que nos estamos encontrando, pero se podrán hacer,  creemos que son necesarios, ensayos ante esta realidad, desde la aceptación  y el convencimiento de que este momento está cargado de esperanza.

Y otro gran reto: hoy caminamos hacia una iglesia de minorías, como elemento que debemos aceptar, y tendremos que aprender a trabajar y compartir este proceso, y siempre con un horizonte de años vista para cambiar la forma de mirar esta misma realidad. 

Apreciamos que la sociedad valora mucho dentro de la Iglesia lo que es el humanismo: caritas, sacerdotes de pueblo o barrio, misioneros; es decir, existe al día de hoy una significatividad humana en lo que se trabaja y vive, aunque no se valore igual desde los ámbitos religiosos o desde  la misma institución. Creemos que en estos momentos la misma sociedad nos puede decir mucho y necesitamos saber escucharla, para descubrir nuevos ámbitos en los que seguir anunciando y viviendo la fe y el evangelio, con nuevos planteamientos.

semillas y manoEstamos convencidos de la necesidad de una pastoral misionera que nos posibilite:

– Provocar la pregunta para poder iniciar un diálogo, y buscar juntos las respuestas.

-Capacidad de salir y de provocar el encuentro,

-Capacidad de sembrar,

-Situarnos en la vida de la gente y en los parámetros en los que viven,

– No tanto pensar en lo que hay que decir, sino dónde y cómo decirlo,

– Y buscando el Reino de forma sencilla, pequeña y abierta,

3 Responses to ““un grupo de curas…”(1)”

  1. Hoy, Nuestra Señora de Lourdes, la Iglesia celebra la Jornada Mundial del Enfermo. Con su permiso, le pido a usted y a sus lectores que se acuerden de nosotros en sus oraciones.
    Muchas gracias.

  2. Disculpe. No me llamo Chema ni pretendo usurpar la personalidad de nadie. No había manera de enviarle el mensaje y al escribir “Chema” el servidor lo ha aceptado. Pido nuevamente disculpas, y acuérdense de nosotros. Gracias.

  3. La poesía, como el pan de cada día:

    Estas serán las dos grandes tareas de sus enviados:
    decir a la gente lo cerca que está Dios
    y curar a las personas de todo cuanto introduce
    mal y sufrimiento en sus vidas.
    J. A. Pagola
    “Jesús: aproximación histórica”

    Feliz semana para todos y os tenemos presentes en nuestras oraciones, también el día de la Virgen de Lourdes.