“Benedicto XVI y los profes jóvenes”
HOMBRE Y DIOS
Este es el título de la asignatura que un año más imparto en la Facultad de Ciencias en la universidad de Extremadura; se trata de una asignatura de libre configuración para el alumno, en la que planteamos la cuestión de la verdad y el acceso a ella desde los distintos saberes, y la cuestión de la complementariedad de los mismos, sobre todo en lo que se refiere al universo y al ser humano.
Este año la introducción al tema de la verdad y el saber la recogemos del discurso del Papa a los profesores universitarios jóvenes en el Escorial en el mes de Agosto. ¿ Qué dijo allí el papa a los profes? Intento recoger algunas ideas que me parecen fundamentales:
1.- La universidad es el lugar en el que se busca la verdad en todos los saberes, y eso de un modo propio: “ayuntamiento de maestros y escolares” (AlfonsoX)
2.- Los jóvenes necesitan referencias en los profesores y estos deben huir de dedicarse exclusivamente a formar profesionales competentes y eficaces, sin atender a algo más elevado que corresponda a todas las dimensiones que constituyen al hombre. No vale la pura capacitación técnica.
3.- La persona y su dignidad debe estar en el centro de la búsqueda del saber universitario, no se debe permitir caer en ideologías, o lógicas utilitaristas, que situen al hombre como mero productor y consumidor.
4.- La universidad, siendo fiel a la tradición y las cuestiones esenciales del ser humano, ha de ser espacio de novedad y creactividad actualizada, mirando al futuro y a sus posibilidades, para avanzar en la verdad y en el bien. Ilusionar en la verdad y en la creatividad ha de ser fundamental en la vocación docente e investigadora.
5.- El caminoa hacia la verdad integral lleva al compromiso del ser humano entero; la verdad, el bien y el amor se exigen mutuamente y se complementan, si alguno de estos elementos falta, faltará la esencia del saber y de lo verdadero.
6.- El saber auténtico sólo nos llega por la via de la humildad; el saber que separa, que otorga poder sobre los otros y superioridad, no es auténtico, la autenticidad viene por la humildad y el servicio, es auténtico el saber que acerca y aproxima.
Ni que decir tiene que estas claves rezuman los modos y sentimientos del “maestro” Jesús de Nazaret en la universidad de la vida y de la humanidad. No está mal recordar estas claves cuando estamos comenzando el curso. Y una vez más nos abrimos al pensar de los alumnos:
¿Cómo ven ellos estas ideas del papa desde su vivencia universitaria en las aulas y en los laboratorios que día a día transitan?
¡ Menudo parafo a tener encuenta !
pienso que el discurso es acertado dentro de una utopia imposible, ya que, que se den todos esos componentes dentro de una organizacion como lo es la universidad, es tan imposible como ideal. Aun asi al hilo de esto, se deberia recuperar un valor como la etica profesional, que pienso que se ha perdido y que resta importancia al profesionalismo cuando un trabajador carece de ella.
Desde mi humilde perspectiva, la docencia en general, no solo la universitaria, debe formar personas, antes y además que profesionales. Es comprensible que la especificidad y exigencia académica de los estudios universitarios desvirtúan el carácter humanista y formativo inherente a la docencia en aras de mayor dedicación a la disciplina estudiada, pero no por comprensible deja de ser un error. Si, en los estudios previos al ciclo universitario, el papel del profesorado no se reduce (o al menos no debería reducirse) simplemente al de transmisor de conocimientos ¿por qué ha de ser diferente en el tramo final y más exigente del periplo educativo? ¿sólo necesitan formación y desarrollo como personas los niños y los adolescentes? ¿acaso somos tan vanidosos que pensamos que, solo por llegar a la edad adulta y ser un ciudadano de pleno derecho, nuestra formación personal, ética o moral ha terminado?
Nos dice el Papa que la humildad es una virtud indispensable que protege de la vanidad en la búsqueda de la verdad y yo creo que la búsqueda de la verdad es el fin último de todo ejercicio intelectual (como por ejemplo la docencia y el estudio) y es precisamente el intelecto lo que nos distingue de los demás seres de este mundo y nos hace únicos, irrepetibles, nos hace humanos.
Desde mi punto de vista, la universidad debe ayudar a los jóvenes a la búsqueda de la verdad en todos los sentidos de la palabra. Quizá hoy la mayor parte del profesorado puede que solo se dedique a formar meros profesionales, pero no debemos generalizar, puesto que también existen casos opuestos.
Además, pienso que falta cierta parte de compromiso por parte de los jóvenes que formamos parte de la misma (entre los que me incluyo), pues de nada sirve que un profesor se preocupe por ti o intente hacerte ver las cosas desde otro punto de vista si uno mismo no muestra interés por ello, y esto puede hacer que incluso el profesorado acabe desmotivándose y centrándose simplemente en dar sus clases.
En resumen, creo que esta universidad de la que nos habla el Papa es difícil de conseguir, pero posible, todos debemos aportar nuestro granito de arena para intentar cambiar la universidad a mejor, podemos llegar a conseguir mucho más de lo que pensamos
En mi opinión, no creo que la universidad sea una condición indispensable para la búsqueda de la verdad, debido a que para mí la verdad es inherente y única de cada persona según las experiencias que esa persona haya vivido en su vida y lo que haya sacado de cada una de ellas. Por lo tanto creo que la universidad es uno de los medios por el que se puede encontrar la verdad y como es uno entre tantos debe tener una utilidad formativa en los saberes y que cada persona utilice la universidad como un medio de la búsqueda de la verdad y no como un fin para buscar la verdad, sino ¿Qué pasa con esas personas que por diferentes motivos no han podido ir a la universidad? ¿es su verdad menos valida?.
Creo ante todo que el profesor debe ser tratado como lo que es, una persona que nos entrega su saber y cuya profesion deberia ser mucho mas valorada pero si esta es entregada, un buen profesor te marcara para toda la vida y se trata ante todo de crear no solo una mente formada en conocimientos si no una persona integral y con una serie de valores. No es una persona mas persona por haber pasado por la universidad, pero este camino, quien pueda tomarlo, debe ser aprovechado para enriquecerse de todas las experiencias que te pueda proporcionar en cuestion de conocimientos y sobre todo apertura mental en todos los sentidos, para mi una buena universidad debe permitir el libre pensamiento y el flujo de estos y darte herramientas para enfrentarte no solo a la vida laboral y profesional si no a la vida en general mediante la creación de personas cabales y capaces de pensar por si mismas, con opiniones formadas y capaces de transmitirlas a los demás.
Desde mi punto de vista, los profesores universitarios deberían involucrarse mas con los alumnos, sobre todo los primeros años de carrera, ya que para nosotros la universidad es un mundo nuevo.
Mas bien por falta de tiempo para impartir su materia, los profesores se limitan a dar su temario en las horas lectivas, sin tiempo para interaccionar con los alumnos y a veces sin conocer sus nombres.
La universidad te enriquece como persona, ya que conoces a muchas gente, cada una con un punto de vista sobre la vida, con distintas inquietudes y con las que puedes debatir distintos temas. Esto nos ayuda a entender la verdad de cada persona.
la verdad es algo que todo el mundo intenta buscar, cada uno a su modo y desde su humilde punto de vista, no obstante por regla general los universitarios tienen o anhelan mas conocimiento y por ello buscan la verdad mediante la universidad. el problema esta en que la universidad hoy en dia es impartida como un chorro de saberes los cuales no dan lugar a la duda ni a la opinion ya que para algunos profesores su verdad es absoluta y no dan opcion a opinar. por eso yo creo que los profesores deberian incentibarnos mas a querer saber mas y ayudarnosa ello, no solo a aprendernos sus conocimientos como si fuera eso lo unico existenete y no pudiera ser mejorado
Que la universidad hoy en día sea lugar de formación meramente profesional, bajo mi punto de vista, es consecuencia de la demanda de la sociedad actual. Nuestra formación se centra en lo profesional, por lo que la búsqueda de la verdad de cada uno, corre de nuestra cuenta. La universidad, y con ella los profesores han evolucionado hasta adaptarse a esta situación. Esto es algo que no comparto, ya que la universidad debe ser un lugar para el crecimiento personal y profesional, donde sin duda, los profesores son responsables de guiar nuestro camino en la búsqueda de la verdad en todos los campos. En otro comentario se ha dicho que esta idea de universidad es una utopía, pero no es así del todo, ya que en mi experiencia me he encontrado con profesores que entienden y siguen el modelo de universidad que se propone en el discurso y que no solo me han aportado conocimientos, sino que me han hecho crecer como persona y me han guiado. Estos profesores son lo que se recuerdan. Como nos dijo mi profesor de física del instituto el día de la graduación: “Que no seas vosotros los que paséis por la universidad, deja que la universidad pase por vosotros”.
creo que todos coincidimos en algunos aspectos el aprender el crecer, la busca de la verdad! pero la encontraremos algun dia? cuando los que mandan en el mundo son los que menos nos dicen la verdad! la corrupcion en los mas altos responsables, hasta en la iglesia! ojala pudieramos cambiar el mundo y fueramos todos mas humanos. El hombre no nace, el hombre se hace; la vida es la mejor maestra seria bueno aprender todo en la facultad,pero seguiremos aprendiendo mucho despues de ella.
Existe una realidad que cada dia destaca menos en las aulas no solo entre los alumnos sino tambien por parte de los profesores y no es otra, que la falta de verdad.En la universidad deberán formarse profesionales para afrontar el dia de mañana una serie de tareas que no solo son profesionales,y es esta carencia la que está provocando el desinterés a la hora de aprender y crecer y es esta apatía la que lleva a los profesores a no tener ilusión por enseñar,compartir experiencias con sus alumnos y transmitirle una serie de valores que ellos un dia recibieron y que quizá gracias a estos y a los padres hoy están en la universidad formando personas.Yo soy un alumno con una edad fuera de lo corriente en la universidad,tengo cuarenta y dos años,casado con tres hijos y trabajando, pero en esta experiencia compartiendo clase con los jovenes me ayuda a valorarles y a considerar mucho la forma de actuar con mis hijos que todavía son muy pequeños, y es mi obligación prepararles para una sociedad que no tiene ganas de crecer y que no muestra interés por formar personas.Os digo una cosa, este año despues de muchos encuentros he podido disfrutar rodeado de dos millones de jovenes casi todos universitarios acompañando en Madrid al Santo Padre,os aseguro que existen unos jovenes universitarios y unos profesores que se importan y se preocupan mutuamente unos de otros,por eso creo que esto está cambiando.
Desde mi punto de vista, nos conformamos con el sistema educativo, tanto profesores, los que imparten los planes generales de enseñanza; como alumnos, meros pupilos y en muchos casos simples oyentes.¿ pero porqué?¿cuál es el motivo de esta desidia impuesta por algunos y aceptada por otros? Supongo que la problemática educativa actual primero viene de la propia política, puesto que a cada cambio de gobierno tenemos un cambio educativo, con ello pérdida de valores constante y una gran confrontación de ideas partidistas. Segundo, la escasez de recursos con que cuentan los docentes, meros siervos de un sistema económico del que dependen. Y por último, la inhumanización, mecanización o sistema de producción que busca el máximo beneficio sin contar con los valores esenciales de las personas, sin implicar maestro y pupilo, sin indagar en la búsqueda de la verdad. Podría decirse que el sistema educativo actual es como un negocio, una fría y dura realidad que ha desamparado el concepto de universidad como ente de conocimientos, sensibilidad y humanidad, no digamos de búsqueda personal de la felicidad o de la verdad. Como citaba el texto dirigido a docentes: “sentís anhelo de algo más elevado que corresponda a todas las dimensiones que constituyen al hombre” ,¿ de que nos servirá tener éxito en una “dimensión” si podemos fallar en lo más básico de nuestra vida? En este caso la dimensión sería la formación universitaria con su respectiva búsqueda de la verdad, pero no somos máquinas que programar, cada uno debe buscar su propia verdad y así al menos defenderse en todas las “dimensiones” de su propia vida o verdad.
Desde mi punto de vista, pienso que la Universidad, los que tenemos la suerte de poder pasar por ella, nos ayuda en la búsqueda de la verdad en lo que se refiere a los saberes, no siendo indispensable para la búsqueda de la verdad , ya que no todo el mundo puede por “X” motivos acceder a ella y no por ello es mejor o peor persona.
si que es verdad, que en la Universidad (desde mi punto de vista) uno crece como persona. Algunas personas, como yo, marchamos de casa de nuestros padres y esto conlleva a asumir nuevas responsabilidades. Interactuamos con gente nueva y tenemos una nueva perspectiva de la vida, pero pienso que la Universidad en lo referido a los saberes, nos aporta los conocimientos teóricos para enfrentarnos a la vida laboral, pero a menudo eso no es suficiente, ya que muchos profesores no van más allá de impartir sus clases, no interactúan con los alumnos y no conocen sus inquietudes acerca de lo que les esperará al término de sus estudios.
Por experiencia propia, sé que una vez que estás trabajando, bien sea de lo que estás estudiando o no , no todo es igual que lo que te han contado en las aulas, y tienes que aprender a afrontar esa nueva situación.
Creo que la búsqueda de la verdad está en la propia persona, en sus experiencias personales, en el entorno en el que se desarrolla, ya que para algunos nos puede ser provechoso el paso por la Universidad pero para otros es un trámite; están en ella porque es lo que sus padres quieren, o no saben que hacer al acabar el instituto.
y es por esto último por lo que cada vez más hay una falta de compromiso por parte de los estudiantes, pero también tiene la culpa en parte el sistema educativo, no solo los profesores, y gran ejemplo tenemos con la implantación del plan Bolonia. yo estoy intentando, y digo intentando, porque como much@s, cada día encuentro más trabas, terminar la carrera. Yo estudio una diplomatura que se extinguió el año pasado y este año encuentro que no podemos matricularnos en condiciones, no tenemos docencia en ninguna asignatura salvo las de libre elección, etc.
Así como vamos a motivarnos?
Desde el punto de vista de la VERDAD, creo que la Universidad cumple al 100% este objetivo, pero la verdad en el marco del conocimiento científico, no del humano, pero lo veo normal, ya que, detrás de esos expedientes brillantes,doctorados, cátedras y “másters del Universo”, se evalúan conocimientos científicos y no humanos, justo los que carece la Universidad, salvo excepciones, por supuesto, por lo que se podría decir que, a nuestra “vieja amiga” Universidad, todavía le queda medio camino por recorrer, o lo que es lo mismo, todavía NOS queda medio camino por recorrer, ya que, Universidad somos todos; aun así, enhorabuena por todo lo recorrido en el campo del conocimiento, esfuerzo y tenacidad.
En cuanto a los JÓVENES y la referencia que éstos puedan ver en los PROFESORES, creo que solo se cumple en el ámbito del conocimiento de la materia que imparten, y no en el humano ni en el personal, entre otras cosas, porque el Universitario viene a clase, si es que viene, para que le expliquen un tema “y pare usted de contar”, en vez de esperar encontrar algunos vestigios de valores, novedad o actualidad que nos puedan llenar un poquito más. Eso, parece que ya no importa, o al menos nos comportamos como si así fuera. No podemos pedir que la Universidad sea Humilde si nosotros mismos no lo somos ni con ella, ni desde ella, por lo que creo que hay más Humildad en la puerta de un banco que en la de una Universidad (y eso me da miedo, la verdad).
Resumiendo, pienso que la Universidad está volcada en formar solo profesionales competentes y eficaces, en vez de a seres humanos con valores para que trabajen de forma competente y eficaz, y sobre todo, ayudando a aquellos que se queden atrás, pero desde mi experiencia, sí que debo destacar a profesores volcados con la parte humana del alumno, a los cuales es un regalo verles trabajar, y también destacar la indiferencia del alumnado ante las vivencias de lo personal y de todo lo que gire alrededor del eje de lo moral, la humildad y la verdad espiritual.
En mi opinión, este discurso del Papa describe una parte que debería estar muy presente durante la época universitaria y que prácticamente ningún profesor realiza en ella. Bien es cierto que los jóvenes podemos ver nuestra etapa académica final como una época de fiestas y en la que sólo tratamos de aprobar exámenes para obtener un título, pero eso es una parte de lo que realmente debería suponer para nosotros la universidad. También es cierto que gran parte del problema radica en los profesores, intelectuales en su campo pero con muy poca vocación docente, lo que provoca escaso compromiso con el alumnado y con su labor de formadores no meramente de profesionales para la sociedad, sino como personas que buscan la verdad más allá de eso, y creo que ese problema lo refleja muy bien el Papa en sus palabras: “el camino hacia la verdad completa compromete también al ser humano por entero”, y ese compromiso es el que hecho yo en falta en muchas ocasiones en dichos profesores.