La “comunión” de Adri

AdriQuerido Adri:

Hoy he disfrutado en la celebración de tu primera comunión. Primero en la Iglesia,  cuando con tus ojos llenos de brillo y de luz, has estado en toda la celebración fijo, vivo, alegre, ilusionado, emocionado, atento, cómplice de todos y de todo, tu corazón seguro que iba muy rápido. Después hemos compartido la mesa y el momento más emocionante de toda la comida, cuando han proyectado palabras de vida sobre tu pequeña persona, como si ya fueras definido y maduro,  alrededor de tus inquietudes, gracias y gestos han ido apareciendo fotos de tu vida, de toda tu vida.
IMG_5464En todas aparecías  con un marcado acento de vivacidad y compostura, como quien sabe querer y, sobre todo que lo quieran. Al aparecer tus fotos con todos los que te quieren y que tú quieres –entre los que me contaba remojado contigo en la piscina- , te sentías centro del encuentro y te reías con gracia y nervios, no podías parar, y al final no pudiste más, la emoción te sobrepasó y llorabas como el niño más feliz y más querido del mundo. En ese momento,  no pude retener mis  ojos, brillaron y las lágrimas  aparecieron, discretas y anónimas, reavivando mi capacidad de emocionarme y de sentir el milagro, que tú hoy habías realizado y recibido.  Sí, hoy tú nos has hecho un gran regalo, y a la vez has sido el mayor receptor del regalo que hacías. Ahí está el milagro. Me explico.

IMG_5455No han jugado contigo,  no se ha entrado en el juego de celebrar la comunión  y después separarnos familias por un lado y otro, ni siquiera el teatro de celebrarla en dos días distintos para cada familia, como si tú estuvieras dividido por dentro. Hoy el milagro ha sido ese, que sin perder nadie – ni tu padre, ni tu madre- , por ti hemos ganado todos. IMG_5460Tú en el día de tu encuentro con Jesucristo, has estado unido por fuera  y por dentro; es cierto que ha habido muchos regalos, pero ninguno como el que te han hecho – logrado por ti y tu deseo de ser feliz-  de estar todos juntos por encima de las diferencias, mostrando que en tu persona lo único que hay son motivos para la unión, y que tú no eres responsable, ni has de ser sufridor, de decisiones y cuestiones que corresponden a tus mayores. Yo, que he estado como sacerdote concelebrante en tu parroquia y con tu párroco, sirviéndote la comunión, me alegro de haber sido testigo de este modo de celebrarlo. Creo que en medio de las dificultades, el sacramento se ha realizado en el seno del templo, pero también en el modo de celebrar el banquete  de la comida.IMG_5453 Felicito  sin dudarlo a tu Madre y  a su compañero Serafín que te quieren con locura; a tu padre Nando, a quien le he visto muchas lágrimas en momentos distintos, signo del cariño que te tiene; a tus abuelos maternos y paternos – que imagino que han tenido que ver mucho para que esto fuera posible de esta manera, aunque tuvieran su dolor- , a todos tus tíos y primos de ambas ramas, a la familia de Sera, y a todos y cada uno de los que hemos entendido, que lo fundamental es la unidad y la unificación del niño que se está haciendo, y que necesita ser amado y querido sin fisuras. IMG_5450Hoy  las diferencias han pasado a un segundo plano, porque la comunión en tu persona y de tu persona nos ha unido, frente a todo lo que separa y distancia. El efecto del  Jesús  sacramentado que has recibido en el pan consagrado ha sido auténtico, y su palabra, la que pertenecía al Domingo, que yo he proclamado  en la misa, se ha cumplido  de un modo evidente: “La paz os dejo, mi paz os doy. No la doy como la da el mundo”. Ahora cuando ya es de noche y recuerdo el día y lo vivido, pido a Dios Padre que siempre encuentres la paz, y que te siga dando su espíritu para que tu persona siempre sea un motivo de unión y comunión entre todos los que te quieren, aunque haya sus diferencias y sus distancias;pan partido que podamos seguir valorando que lo más auténtico es aquello que se hace para que tú – y todo niño inocente – siempre puedas tener unidad interna  y nunca te sientas  separado,  dividido o roto, ni por dentro ni por fuera. Yo creo que te emocionó sobremanera ver tu vida unida, con todo y con todos los que te quieren, sin que faltara nadie en esas fotos de tu vida que se proyectaba, ni en ese momento de celebración que para ti ha sido único.

Un abrazo y no te olvides nunca de Jesús, que será quien te dé las fuerzas para que tú seas siempre nudo que una y haga comulgar la vida en lo bueno.

2 Responses to “La “comunión” de Adri”

  1. signo de identidad para muchos niños .

  2. Tus palabras nos conmueven Pepe, ha sido una auténtica maravilla esta celebración. Creo q todos nos sentimos más cerca de estar en paz con nosotros mismos después de la Comunion. Cuándo intentas hacer feliz a los demás es cuando más cerca estás de conseguir una satisfacción plena. Todos nos hemos emocionado. tengo la impresión de que la comunión de Adrián ha sido un punto de inflexión y nos muestra el camino ha seguir para conseguir la felicidad de nuestros seres queridos. Un abrazo Pepe y gracias de todo corazón Por creer en nosotros.