Marzo, el mes de monseñor Romero

El 23 de marzo pasado publiqué en este blog un artículo sobre monseñor Romero. En mi vivencia de fe, este es el mes de monseñor. Le recuerdo mucho durante todo el año, pero tal vez por el aspecto conmemorativo lo hago más durante estos días. Releo sus textos y escucho alguna de sus homilías. Siempre acabo preguntándome qué diría y haría monseñor en nuestras circunstancias actuales, cómo intentaría iluminar los problemas que afrontamos ahora, tal como intentó ayudar en las difíciles circunstancias que le tocó vivir. Echo mucho de menos voces iluminadoras en el momento actual, a veces difícil y casi siempre confuso.

Rezo mucho con sus palabras, llenas de profundidad y fe en el Dios cristiano. Resultan de una serena belleza las últimas frases de la llamada “última homilía”, pronunciada en Catedral el domingo veintitrés de marzo de 1980, el quinto domingo de cuaresma, palabras que fueron proféticas y pronto se hicieron históricas y que concluían con su desgarrado llamado al ejército para que dejase de reprimir al pueblo. Cuando cesaron los aplausos, concluyó monseñor Romero:

“La Iglesia predica su liberación tal como la hemos estudiado hoy en la Sagrada Biblia, una liberación que tiene, por encima de todo, el respeto a la dignidad de la persona, la salvación del bien común del pueblo y la trascendencia que mira ante todo a Dios y sólo de Dios deriva su esperanza y su fuerza.

Vamos a proclamar ahora nuestro Credo en esa verdad …”

Tal vez fuera bueno, con el ánimo de iluminar circunstancias difíciles, confrontar nuestras realidades sociales y personales con esas frases, Evangelio puro expresado en palabras más modernas. Los gobiernos, dirigentes, gestores, podrían preguntarse si ejercen sus cargos con respeto a la dignidad de la persona, con el ánimo de conseguir el bien común y respetando la trascendencia. Y cada uno de nosotros en su realidad cotidiana y particular puede hacerse esa misma pregunta: nunca es bueno poner la responsabilidad de las cosas en otros, por más que posean más poder y por ello su responsabilidad sea mayor.

En tiempos difíciles he recitado tantas veces las palabras de monseñor, que ciertamente sólo de Dios derivó su esperanza y su fuerza, y Dios le mantuvo firme hasta el final.

Recen por los enfermos y por quienes les cuidamos.

PS. He intentado incluir un enlace para que pudiesen escuchar de voz del mismo monseñor los últimos párrafos de su homilía, pero me ha sido técnicamente imposible. Si alguien está muy interesado sólo tiene que dejar un comentario con su correo electrónico y se lo enviaré personalmente.

Discussion area - Dejar un comentario






He leído y acepto las condiciones generales y la política de privacidad


Información básica sobre protección de datos
Responsable: REVISTA REINADO SOCIAL 21RS (más info)
Finalidad: • Gestión de la adquisición del producto, suscripción o donativo, así como la tramitación de los mismos.
• Envío de comunicaciones relacionadas con el proceso de compra, las suscripciones o los donativos.
• Envío de comunicaciones y ofertas comerciales, por diferentes medios, incluidos los medios electrónicos (email, SMS, entre otros). (más info)
Legitimación: Ejecución de una compra online, suscripción o donativo. (más info)
Destinatarios: No se cederán datos a terceros, salvo obligación legal. (más info)
Derechos: Acceso, rectificación, supresión, cancelación, y oposición. En determinados casos derecho a la limitación del tratamiento de sus datos. (más info)
Información adicional: Puede consultar toda la información completa sobre protección de datos a través del siguiente enlace (más info)
Los enlaces de (más info)