La muerte como fuente de vida

Podría decir que hoy es un día cualquiera, pero no lo es.
Hoy es un día especial, en el que me apetece decir lo que mi corazón siente y padece, y lo que puedo decir o pensar…
Por eso, hoy no es un día cualquiera, es un día muy especial…en el que esta mañana decía a unos “Buenos días”, a otros “Felices Pascuas”, y a un amigo le escribía mis pensamientos…
Pensamientos ocultos que no acostumbro a decir, pero escribiéndolos, como los dicta el corazón, son puros, transparentes, que casi parece pue no me pertenecen…se los llevó el papel escrito por un lápiz…y su respuesta fue inmediata…un gracias de vuelta y un escrito, que quiero compartir, porque me ha parecido tan hermoso…que le he pedido permiso, porque no podía quedármelo para mi sola.
Gracias mi amigo. Gracias mi hermano.
!Ahí va!
“Declaramos que los días, desde hoy, serán todos de fiesta.
Declaramos que la fiesta la hace el corazón y no el trabajar para tener
más. Aceptamos que el que pueda aportar más motivos de celebración y de
alegría será tenido como el primero entre nosotros. Declaramos que los
pesimistas y aguafiestas y los que entierran todo antes de nacer serán de
curso ilegal. Nos reafirmamos en que los atentados contra la alegría de
vivir serán perseguidos y podrán optar a un indulto otorgado desde por el
cielo, las estrellas y sol. Declaramos que toda palabra que no sirva para
empujar y animar se considerará un peligro social. Nos esforzaremos en
que el sonreír sea siempre bien visto entre nosotros. Consideraremos como
victoria en el campo contrario saber reírse de un mismo. Declaramos
convencidos que los miedos y los desánimos son fantasmas irreales.
Declaramos subversivas todas las excusas vengan de donde vengan y sean las
que sean, que suelen ponerse para justificar la tristeza, el malhumor, la
desesperanza y otros pesimismos. Tenemos de ahora en adelante por
inaceptables expresiones como “todo va mal”, “esto no hay quien lo
arregle”, “esto es un asco”, este mundo no hay quien lo aguante”.
Se declaran sitios turísticos y monumentales la primavera, la carcajada,
el cantar, el brillo de los ojos y los tonos cálidos de los colores y de
los afectos. Desde ahora y en adelante serán tenido por nongratos quienes
echen a perder la alegría y dejen escapar el gozo del corazón, sobre
todo, los aguafiestas y los profetas de desgracias. De declara que el
mundo es capaz de vivir en paz, con alegría y que quien investigue en las
causas de este fenómeno para muchos desconocido, será propuesto para el
nobel en ciencias de la vida. Se subvenciona a perpetuidad, cualquier
promoción de la bondad, de la delicadeza y del respeto. Finalmente en
atención a las aspiraciones más profundas de la g ente y por el amor
entrañable de nuestro Dios, se declara este mundo en estado permanente de
esperanza y se otorgará el titulo de hijos de Dios a todos los que
trabajen por la paz.”

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