La peluquería de Dios

Mt 10,26-33 No tengamos miedo. Dios Padre cuida de nosotros, tiene contados hasta nuestros cabellos, revuelve con su arte nuestra imaginación y nos hace sonreír. A Dios le preocupamos, somos importantes para Él. Todo le resulta importante, incluso la pequeñez de los cabellos.