Fray Leopoldo, la alegría de seguir a Jesús
Fray Leopoldo nació en Alpandeire, un pueblo de Málaga, en una familia de humildes campesinos. Fue un joven muy trabajador y de buen corazón, que sintió la llamada de Jesús a seguirle. Dejó a su novia para servir a Dios en la orden de los frailes capuchinos. Vivió siempre la alegría de haber respondido que sí al Señor. Tuvo como modelo de seguidor de Jesús al Beato Diego José de Cádiz. Realizó trabajos sencillos y humildes de la vida diaria como pelar patatas ayudando en la cocina, barrer los claustros del convento, atender la portería o pedir limosna. Su entierro fue multitudinario y en él participaron miles de personas de Granada de todas las clases sociales que lo consideraban como un santo.
Fray Lepoldo será beatificado el 12 de septiembre en Granada. Desde nuestro blog, damos gracias a Dios por este acontecimiento para la Iglesia.
– ¿Por qué crees que fue feliz Fray Leopoldo que renunció a muchas cosas importantes en su vida y se dedicó a trabajos muy sencillos? ¿Qué enseñanza sacas de la vida de este religioso capuchino?
Desde que conocí a los capuchinos, hará ya 15 años, siempre me ha llamado la atención que los santos más conocidos de la Orden, o por lo menos una gran mayoria son gente sencilla. Hay un doctor como San Lorenzo de Brindis, pero son los Félix de Catalicio, Fidel de Camporosso, el propio Leopoldo… los que se han ganado el cariño de la gente.
Me alegro mucho que sea un religioso no ordenado el que va a ser beatificado. Además que cuente con tanto apoyo popular. Lo sencillo es lo que lleva a Dios
Pues sí, Emilio, los sencillos son los que llevan a Dios. En el caso de Fray Leopoldo hay, por ejemplo, una gran devoción en Andalucía. El Señor se vale de los sencillos para llevarlos hacia Él. Aquí en nuestra parroquia hay algún feligrés al que este futuro beato le ha marcado un montón y no veas cómo hablan de él. Es impresionante. Un saludo desde San Fernando, Fernando ss.cc.