HENRIQUE EL PEREGRINO

Cuando le conocí los dos rondábamos los treinta años. Yo había llegado al suburbio de Salvador de Bahía para pasar unos días con Bernadette e Lucas, laicos consagrados de la comunidad Bethania, que dedicaban la vida a la asistencia de los más pobre. Una casa sencillísima en ese calor tropical aplastante le había robado terreno […]