La escalera del Adviento
Me quiero subir en la escalera del Adviento.
Quiero soñar cuando la humanidad está de noche.
Bombillas de luz, esperando el amanecer.
Cada semana una luz,
cada semana la esperanza se acerca
y se viste con los rayos del sol.
¡Cuánto cuesta subir!
¡Cuánto cuesta sonreír!
El Adviento es un tiempo desconocido.
Haz un test y verás,
qué poco sabemos de esperas.
La escalera del Adviento,
coloca estrellas en el firmamento.
Cuatro estrellas,
ni más ni menos,
pero parecen soles que alumbran
un cercano nacimiento.
La escalera del Adviento,
te invita a vivir una nueva espera.
La espera de la mujer embarazada,
la espera de María que está a punto de llegar a Belén.
La espera del que, enfermo o triste,
sabe que el Mesías pronto llegará.
Quiero colocar mi cartel de Adviento,
camino del nacimiento.
Quiero volar por unos momentos,
subirme a la escalera de los sueños
y del compromiso con un mundo nuevo.
Pero Fernando, si nos has salido poeta y todo!!!!, cuánto tienes dentro, qué belleza ¡!!, Nada, en éste mismo instante, lo dejamos todo, nos subimos a esa maravillosa escalera de los sueños, a encender cada domingo una lucecita, para que cuando llegue Nuestro Salvador, aquí en la tierra esté todo iluminado como en el cielo…
Muchas gracias
Pilar
Pilar, me vas a poner rojo y el color litúrgico es el morado… Besos. Fernando ss.cc.