Discípulos misioneros: siempre en las periferias
“En aquel tiempo, se apareció Jesús a los once y les dijo: Id al mundo entero y proclamad el evangelio a toda la creación”. (Evangelio según San Marcos)
Días difíciles, diferentes, complicados, estamos viviendo. Es cierto que esta situación, tan compleja, nos ha interpelado, sin medias tintas, a todos.
Nos han trastocado la vida. Nos ha removido. Nos ha puesto ante lo esencial. Y al recluirnos, al tener que confinarnos, al vivir la cuarentena… han surgido muchos interrogantes, muchas cuestiones, muchas dudas.
¿Certezas? Jesucristo. ¿Respuestas? El Evangelio. ¿Motivos para la esperanza y el ánimo? Todos, cuando se viven en la alegría del Evangelio.
Así lo entienden todos los discípulos misioneros, que están siempre en las periferias. Y cuando digo siempre, es ¡siempre! Porque en estos días estamos viendo como algunos medios de comunicación ponen el foco sobre las “excentricidades pastorales” o sobre las “incontinencias digitales pastorales”, pero parecen obviar el trabajo silencioso de miles y miles de discípulos misioneros repartidos por todo el mundo.
Es el testimonio y el ejemplo de los misioneros que han asumido y aceptado en su vida el mandato evangélico, que recoge el Evangelio según San Marcos”: “En aquel tiempo, se apareció Jesús a los once y les dijo: Id al mundo entero y proclamad el evangelio a toda la creación”.
Id al mundo entero… Sí, mirad detrás de las noticias, quitad los titulares más absurdos, buscad lo esencial, la verdad, y ahí encontraréis a los misioneros y las misioneras, viviendo la fraternidad humana, haciendo real la fraternidad misionera, compartiendo la vida junto a otras personas. Y no lo hacen como héroes, no lo hacen por vanagloria o búsqueda de honores, sino porque en cada hombre y mujer está Jesucristo, porque en cada persona estás también tú, desde la vivencia de la universalidad de la fe, desde la vivencia de la catolicidad de la fe.
#AhoraMásQueNunca es la campaña que han lanzado las Obras Misionales Pontificias de España para respaldar la iniciativa del Papa Francisco, porque el Fondo de Emergencia COVID19 ayudará a todos los misioneros y las misioneras, para apoyar la labor de todos los que afrontan situaciones complicadas y difíciles.
En este día en el que el Evangelio nos recuerda la universalidad de la Iglesia, por ende la catolicidad, es bueno apoyar y respaldar iniciativas como este Fondo de las OMP que tiene una dimensión universal, con criterios solidarios y sobre todo equitativos. Es momento de saber dónde poner también nuestra aportación económica, para que llegue realmente por los cauces más seguros y coherentes.
Colaboremos, hagamos nuestra aportación y también continuemos fortaleciéndonos en la oración misionera, porque en la oración vivimos también la fraternidad que nos hace verdaderamente hermanos en Cristo, una comunidad de hermanos dispuestos a la ayuda misionera.
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