LA ESPAÑA ENFERMA

unnamedHay una España enferma, el mal salta a la vista: enferma de politicismo. No es una España política, ocupada en la cosa pública, leída y entendida en los temas de todos. Es una y son dos, pero es una. No es la de la idea, sino la de la rabia. Es endémica y pandémica, sufre el cáncer del sectarismo y dudo que haya médico que sea capaz de curarla. En la parte de arriba de la pirámide están los políticos y es fácil y necesario quejarse de ellos. Ni una circunstancia tan extraordinariamente grave como la que sufrimos les ha servido para olvidar el regate táctico, para mirar más allá, hacia eso que se llama bien común. La enfermedad ha hecho metástasis y se ha transmitido por vía sanguínea a bastantes periodistas. Unos y otros son vasos comunicantes. Aun así, el tema es más grave, porque se contagia de manera difícilmente reversible a través de los tertulianos. Hemos llegado al meollo, a la constatación de que el mal, que viene de arriba, está calando en las regiones intermedias, porque los tertulianos peores no son los que tienen plaza en las radios y las televisiones. Las redes sociales han multiplicado exponencialmente a los tertulianos, ya hay una legión inmensa de comentadores en Twitter, Facebook, WhatsApp que no hablan desde la razón, sino desde el odio. Un odio en buena medida impostado, pero da igual, la semilla se ha extendido y ha germinado en el barbecho mental. Hay una España más manipulable que cultivada, más propensa a la infamia que a la buena fama, que ladra sin cesar, día y noche, y muerde y se regodea en la calamidad. Hay todavía otra España, mayoritaria, que vive y labora, que sufre y desea lo mejor para su país y para su gente, aunque también esa corre el riesgo de pudrirse. Me duele, pero constato que las dos Españas cansinas, resentidas, que se odian con encono, enfermas de rencor, no deben estar tan lejos de las del 36, cosa distinta es que los tiempos y, sobre todo Europa, nos vayan a dejar jugar a nuestro juego preferido. Con estas cosas, no obstante, hay que tener cuidado, porque lo que comienza siendo juego de alta política acaba en la realidad de los bares y un país puede terminar fatalmente dañado. Ahí tienen el caso de Cataluña, artificialmente envenenada por sus castas dirigentes y hoy en cuidados paliativos.

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A políticos y tertulianos les une la misma obsesión politicofóbica: que haya treinta o cuarenta mil muertos a causa del coronavirus, que la miseria se extienda y amenace con arrastrarnos a tiempos sombríos, que la gente sufra uno a uno en su casa, su dolor, su angustia les importa un rábano, salvo en lo que les vale como munición para disparar al enemigo. El otro día, un conductor de la tele (una subcontrata) que me llevaba de aquí para allá me contó que por ocho horas de trabajo gana 43 euros netos… y se me cayó el alma a los pies. Bien, pues eso a nuestros políticos y tertulianos (ya saben Facebook, Twitter, WhatsApp, más periódicos, radios, etc) les importa una higa, si no es en lo que les sirve para acusar al tertuliano de la otra orilla. Ya ven que hablo de tertulianos en plural. ¿Es que es igual la izquierda que la derecha? ¿Es que soy equidistante? No, los que son semejantes hasta el empacho son los tertulianos, y tengo la tentación, que no voy a reprimir, de parafrasear a José Antonio Labordeta y decir: váyanse todos a la mierda.

22 Responses to “LA ESPAÑA ENFERMA”

  1. Magnifica descripción del virus letal del cainismo español. Letal porque lo primero que mata es la capacidad de razonar. “La lucidez ha muerto, todo está permitido”.

  2. Gran artículo, Juan Antonio, no puedo estar más de acuerdo. La política se ha vulgarizado hasta convertirla en un pim pam pum sin sentido. Como dicen los clásicos, si todo es política, nada es política.

  3. Una reflexión necesaria, Juan Antonio, sobre lo que importa.

  4. Según lo que has escrito hay dos españas: una enferma de politicismo, sectaria (no de la idea sino de la rabia) que muerde y se regodea en la calamidad, y otra , mayoritaria que vive y labora, que sufre y desea lo mejor para su país y que corre el riesgo de pudrirse.
    Según esto, serían tres las españas. Estoy de acuerdo. Lo malo es que las dos españas sectarias, las de la rabia son el resultado de la manipulación mediática a la que estamos sometidos todos los españoles.
    La otra españa, la mayoritaria, la que vive y labora y que tu dices que está a punto de pudrirse, ya está podrida. No recibe otra información que la que dan las televisiones, el nivel educativo y de conocimiento es peor en cada generación, y se nutren de Sálvame esencialmente.
    Estoy contigo en que la situación es crítica. Agravada por la crisis que ha provocado la pandemia,
    Lo lamentable es que dentro de lo malo, nos ha cogido en el peor momento.
    Todos los gobiernos mienten alguna vez, y todos los gobiernos se equivocan alguna vez. Pero lo que tenemos ahora no tiene parangón. No hace falta extenderse en argumentarlo.
    Las preguntas que te haces al final no hay que contestarlas. Son, cuando menos, retóricas.

  5. Genial el final con Labordeta, aunque prefiero algo más educado como el “A la mierda, ¡váyase usted a la mierda!, de nuestro genial Fernando Fernán Gómez. Por otra parte estoy de acuerdo con tu visión de la casta política, nos están superando, quieren hacernos creer que los necesitamos cuando nunca han sido tan prescindibles como ahora, no hay nada más que ver el Congreso casi vacío de sus ilustress Diputados y donde nosechamos en falta a nadie. Lúnico que me pregunto es si consideran nuestra libertad, nuestra democracia gratuita o se la debemos a ellos y tendremos que pagarla de alguna manera. Ojalá me equivoque pero demandan pleitesía a unas siglas, a unos colores y juegan con el trabajo, el espíritu, la desesperanza, la ilusión y la holganozería de nuestroscompatriotas que de seguir así nos llevará a un punto sin retorno, de sinrazón.

  6. Anoche vi en televisión un muy destacable reportaje sobre la vuelta del fútbol. Muy bien hecha la combinación de un aficionado desconocido, pero con dominio del arte de la palabra, y de personas de largo recorrido en la materia, como Petón. Respecto a este post, sí, de acuerdo, muy bien, creo que todo el mundo puede quedar perfectamente conforme al leerlo: dice lo que pensamos todos. O casi todos. Y ya está.

  7. Lo he leído con mucho interés. La bronca política será aquí el escenario para toda esta década de rumbo incierto y seguramente miserable, salvo que más circunstancias imprevistas tensen de otra manera el estado de las cosas. Este pueblo es incapaz de reconciliarse.

  8. Excelente articulo, pero tenemos que llevar la contraria a seitaridis, ya no hay varias españa hay solo una, y no una España enferma como dice Juan Antonio, no. Una España de borregos donde tenemos lo que nos merecemos. Nos merecemos los políticos que tenemos (estos no corrieron delante de los antidisturbios, cuando cantábamos libertad, libertad sin ira… ) Y sí, Don cebolla, volvemos al fútbol (ya no son políticamente correctos los toros y el boxeo).
    Una España de borregos donde tenemos lo que nos merecemos, los políticos que nos merecemos; ahh y son capaces de volvernos a poner hasta boxeo… Todo se andará.

  9. Los tertulianos son una opidemia (es decir, una epidemia opinativa). Los medios públicos deberían marcar la diferencia sustituyendo a los tertulianos por especialistas según el tema.

  10. Suscribo todo lo que dices. ¡No puedes tener más razón!

  11. Sin duda que España sufre el cáncer del sectarismo y del politicismo, de la metástasis en bastantes periodistas que se limitan a competir en rapidez con las redes dando novedades o en comentadores que no hablan desde la razón sino desde del odio como dice Juan Antonio.
    De cualquier forma, de todas partes nos llegan visiones del mundo polarizadas. Lo de Estados Unidos da pánico. Pero y lo de nuestro Parlamento nacional, al que ni las mascarillas libera de la fiebre colectiva de desprecio e insultos
    ? Insultos y fanfarronadas, políticos que le insinuan a otro que tal vez querría dar un golpe de estado pero no se atreve, ” hijos de terroristas”….. La vacuna es la misma siempre : aislar a tanto virus para que no se multipliquen entre nosotros. Como con el coronavirus, solo depende de todos y cada uno.

  12. Me viene a la mente las pinturas negras de Francisco de Goya. No tenemos arreglo.

  13. ¡Magnífica reflexión, querido Juan Antonio! No puedo estar más de acuerdo contigo, hasta el punto de que, con tu permiso, la voy a difundir entre mis amigos, conocidos, allegados y otras yerbas. Solo tengo un “pero” que ponerte: al igual que no todos los políticos son iguales, tampoco los tertulianos lo son. Hay muchos políticos y muchos tertulianos a los que se les puede escuchar con respeto y serenidad, se esté o no de acuerdo con ellos. Afortunadamente los que siembran el odio son minoría y tienen nombres y apellidos ( o siglas, que no es lo mismo, pero es igual).

  14. Me adhiero desde la primera hasta la última letra del artículo, incluidos signos de puntuación.

  15. Releo el post. Y pienso en lo que recientemente escribió Manuel Vicent: “Sin pensamiento da igual la sintaxis”. Este post tiene pensamiento y tiene sintaxis. Respecto al contenido. No estoy en las redes sociales, por lo que gano en tranquilidad y tiempo lo que pierdo en otras cosas. En cuanto a los tertulianos de radio y TV no me merecen una opinión negativa. Tuodo lo contrario. Los escucho y estoy de acuerdo o en desacuerdo. Es más, creo que su influencia en la sociedad es muy limitada. Los políticos. Desde que se conoció el 10-N el resultado electoral hubo por parte de la derecha un intento, que se ha reiterado después hasta alcanzar proporciones ilimitadas, hubo, decía, un intento de deslegitimar a un Gobierno salido de las urnas democráticas. Y a los dos meses de formarse este Ejecutivo surgió la pandemia. La culpa de la tragedia que hemos vivido y estamos viviendo, es del virus, no del Gobierno. Y las derechas no han colaborado en nada. Las derechas llevan semanas votando contra la prolongación del estado de alarma: Una irresponsabilidad en busca de los votos de lo que pueda ocurrir en la nueva normalidad. Hace unos días leí un excelente artículo de Boquerini, en el que el autor recordaba que hace unos 4 años un periodista preguntó a Rajoy: “¿Tiene usted un plan de respuesta a una posible invasión zombi?”. Y Rajoy respondió: “No”. En fin, Tirado, a mí los tertulianos, desde Carlos Dávila a Jabois pasando por Antonio Papel, todos y todas, me gustan mucho. Y lo dejo, que voy a escuchar ‘El enfoque’, con
    el gran Félix Madero. Hoy lunes tiene buenos tertulianos

  16. De acuerdo con Cebolla en que el Partido Popular y Vox no han aceptado desde el principio la derrota. No es nada nuevo, el PP no soporta estar en la oposición. Le pasó ya con González y el pesadísimo “Váyase, señor González”, le ocurrió con Zapatero, al que hizo una oposición durísima y muchas veces impresentable y le ha pasado ahora. Debe estar en sus genes. Ahora bien, al gobierno del señor Sánchez se le ve el plumero desde el principio. Alguien poco sospechoso de reaccionario como Rubalcaba habló en su momento de gobierno Franskenstein, cuando se presentó esa opción ahora realizada. No es un secreto que a buena parte del Partido Socialista, históricos, barones y demás este gobierno le produce rechazo. Sánchez ha hecho de la mentira y el cambio constante de opiniones su modo de actuación. A mí mismo me engañó pues voté al PSOE confiado en que no pactaría con alguien que no le dejaría dormir y con partidos cuyo único propósito es acabar con el estado, como Esquerra, y Bildu. La propaganda del gobierno, tan bien manejada por ese virtuoso del tacticismo que es Iván Redondo ha convertido la expresión las derechas en un espantajo, que en sí mismo es un elemento crispador. En esas derechas incluía a Ciudadanos que ahora está rectificando, pero no sé a quien engañará, a mí no, Sánchez-Redondo han encontrado un filón en Vox. Por un lado divide a la derecha y por otro mete miedo y evita la abstención, que es lo que más teme el PSOE. Yo mismo caí en esa trampa, pero no se repetirá. Vox es un partido asqueroso, permítame, señor Cebolla, esa expresión gruesa, pero hasta el momento no ha atentado contra la Constitución como los independentistas catalanes, ni ha alentado a los asesinos como Bildu. Mire usted, entre Otegui y Ortega Lara, no sé con quién se queda usted. Eso no quita peligro a Vox, pero no lo tiene más que los socios de Sánchez. Si tanto se habla por un lado de las tres derechas, habrá que hablar por otro de las cuatro izquierdas (PSOE, Podemos, Esquerra y Bildu). En cuanto al virus, claro que es el que mata, pero el gobierno ha hecho una pésima y errática gestión. ¿Y por qué ha matado proporcionalmente en España más que en otro país del mundo, por qué ese título nefasto? Desde luego no creo que haya habido mala intención, y además quien más tiene que callar es la impresentable Ayuso y su macarra Miguel Ángel Rodríguez. Madrid y sus residencias, gestionadas por el gobierno PP/Ciudadanos/Vox son el principal foco de muerte, de manera que a callar. Con esto voy a desembocar dándole la razón, casi sin querer, a Tirado, porque el patio político es un lodazal y aquí cada uno mira para el lado de sus preferencias, de manera que mucha gente no está ciega, pero sí tuerta, del ojo derecho o del izquierdo.Y los tertulianos son en su mayoría correas de transmisión de los partidos y de la crispación. A usted lo que le pasa es que que se cuida mucho y hace bien, escucha un programa muy moderado y ejemplar y no está en las redes sociales. Yo sí estoy, y créanme que dan asco y convierten la política en un estercolero. Fíjese, como dice Tirado, lo que ha ocurrido en Cataluña que la convivencia se ha arruinado. A todo esto Tirado no ha sido muy original en su artículo. Ya que usted ha citado a Manuel Vicent, voy a citar yo un artículo del propio Vicent que parece que fuera el que ha calcado Tirado, o al menos han coincidido. Supongo que será eso: “existen dos Españas, no la de derechas o de izquierdas, sino la de los políticos nefastos y líderes de opinión bocazas que gritan, crispan, se insultan y chapotean en el estercolero y la de los ciudadanos con talento que cumplen con su deber, trabajan y callan”. Dos Españas que son tres, la de la gente corriente y las dos Españas políticas, envenenadas y envenenadoras. El artículo de Vicent es del 21 de noviembre de 2018, se titula Líderes y está publicado en El País.

  17. De acuerdo en muchas cosas con usted, Eolo. En otras, no. Dos leves matizaciones. De Miguel Ángel Rodríguez lo que más me molesta es su madridismo macarra. Es el típico madridista macarra que no puedo soportar desde mi ya lejanísima infancia. Otra. A Iván Redondo considero que se le atribuye bastante más talento que el que realmente tiene. Iván Redondo no inventó el término “las derechas”.Ni mucho menos. Fue el arquitecto Modesto López Otero quien, tras el triunfo del Frente Popular, exclamó: “Señores, creí que íbamos a ganar las derechas y resulta que hemos ganado las izquierdas”.
    (Esa frase se ha atribuido a mucha gente, pero pertenece a ese arquitecto, según artículo publicado en ‘El País’ por Ramón Chao el 5 de diciembre de 1979 y que obra en mi poder, como tantas cosas absurdas que conservo en carpetas y en la memoria).

  18. Muy de acuerdo con usted, Cebolla. Apenas dos matizaciones: primera, no odio a los futboleros macarras del Madrid, sino a los del Madrid, el Atleti o el Barça. Yo soy del Madrid y no soy macarra. Segundo: naturalmente que no ha inventado Iván Redondo el término las derechas. Lo que está haciendo el PSOE de Sánchez y Redondo es utilizarlo con una clara intencionalidad despectiva. ¿Es igual Ciudadanos que Vox? ¿Es igual Vox que el PP? Durante mucho tiempo y a mi juicio estrafalariamente se ha abusado desdel PSOE del término ultraderecha y derecha extrema. Aquí eran ultraderecha cualquiera que no estuviera en la órbita progresista o seudo. Bien, pues ahí tienen ya la tan buscada ultraderecha. Ahora se trata de englobarla en el adjetivo común de las tres derechas. Pues muy bien, supongo que Podemos será ultraizquierda. ¿Qué pasa con las provocaciones del señor Iglesias, son de recibo? De esquerras y bildus ni hablamos. Otro breve matiz: quizá yo tenga en mucho a Iván Redondo, pero puede que usted lo tenga en poco. Redondo consiguió que Sánchez recuperara el poder en su partido y logró en una genial maniobra con la moción de censura dejar ko a Ciudadanos y aupar al gobierno -Franskentein- al PSOE. Eso solo lo hace un estratega con muchas luces y genialidad política. El mismo que llevó a Albiol a alcalde de Badalona por mayoría absoluta y que consiguió que por dos legislaturas -en la segunda fue consejero- el PP gobernara en Extremadura. Tiene güevos la cosa, eh, el PP gobernando en Extremadura. Dicen que Redondo se ofreció al PP -nada extraño vista su trayectoria- y que allí ni lo escucharon. ¡Tenían a Arriola! Ay, carajo, a usted, Cebolla que le gusta el fútbol es como despreciar a Guardiola porque te está entrenando Maguregui.

  19. Durante los días duros de la pandemia, Eolo, no podía suponer lo que ahora pienso: deseo que vuelva el fútbol. El fútbol, entre otras cosas, provocará que los políticos pierdan plano, que no sean el centro de todo, como en estos últimos 90 días. Santiago Segurola, en un excelente artículo, como todos los suyos, dice hoy en ‘El País en referencia a la vuelta del fútbol: “Nada es más emocionante en estos tiempos que distraerse de las preocupaciones que nos angustian”. Pues eso. Tengo muchos familiares y amigos madridistas. Y volviendo a la vuelta del fútbol. Es indignante que muchos pidan los partidos con público. Porque ha habido, de momento, 28.000 muertos. Y ni en Italia, Inglaterra o Portugal, en ningún sitio, se plantean que haya gente en las gradas. En este sentido sí que he escuchado opiniones deleznables de esos contertulios a los que se refería Tirado. Y lamento que El Mono Burgos se vaya del Atleti. Siempre pensé que Simeone debe gran parte de sus éxitos al Mono. Hace unos 11 años, cuando Germán Burgos entrenaba al CD Carabanchel, una periodista le preguntó: “Defínase como hombre”. Y Germán Burgos respondió: “Yo soy un hombre común”. Y añadió: “Común camión”.

  20. Completamente de acuerdo ahora con usted, Cebolla. Ya sin matices. No tiene ningún sentido que haya espectadores ahora mismo en los campos. Yo no soy mucho de ir al estadio, pero a veces voy. En todo caso, en este momento me hace ilusión el experimento, ojalá no hubiéramos tenido que vivirlo, pero una vez que la pandemia nos ha obligado a esta tesitura vamos a disfrutar un poco de la novedad, ver en qué consiste eso de jugar sin público, comprobar qué nos tienen preparados las televisiones y las radios para las transmisiones. Pues nada, ya verá cómo se empecinan y en un par de semanas tenemos un tercio o la mitad de los espectadores en todos los campos. Bien sabe Dios que lo lamento y todavía más, bien sabe, que no seré yo el que vaya a Valdebebas, nada se me ha perdido por allí. Segurola también me gusta a mí mucho, más que Sámano y más que Relaño. E incluso más que ambos juntos. Yo creo que Segurola es un poco madridista, lo que indudablemente de ser cierto habla de su buen gusto. Relaño y Sámano también, pero esos son para otros paladares menos refinados.

  21. Pues a mí me encantan los debates y los “opinólogos”. Como tengo esta voz fantástica que heredé de mi abuelo biológico -Fernando Fernán Gómez- lideré durante varios años una tertulia política en Radio Buenos Aires, llamada “el barón rojo”, en obvia alusión al color de mi pelo (heredado también de él). Siempre teníamos invitados especiales y , como duró años, entrevistamos a dos presidentes: Raúl Alfonsín, y después, a Carlos Menen, con esas patillas horrorosas y tan desfasadas que en España solo lleva la raza calé y que en Argentina se volvieron entonces a poner de moda entre los peronistas, para darse aires populistas de gauchos. A mí en realidad, lo de ser “opinólogo”me viene de casta, porque antes que yo, mi abuela Martina ya fue contertulia en programas de radio, cuando ninguna mujer lo era… Mi abuela era actriz (de ahí todo el lío con Fernando Fernán Gómez) y, por supuesto, hizo mucho radio teatro. Como era una mujer de tan bella dicción y enorme cultura, enseguida la invitaron a participar en programas informativos, culturales y de entretenimiento. Fue habitual de un magazine matinal muy célebre en “LS6 Radio del Pueblo”, que se llamaba “Plata y Pampa”. En ese magazine co-entrevistó a la entonces primera dama Eva Perón. Existía cierta rivalidad entre Evita y Martina porque en una ocasión a Martina le dieron un papel radiofónico al que aspiraba Evita ( ya saben que Evita intentó ser actriz). Y bueno, además de por ese detalle…Perón era un mujeriego… ahí lo dejo…

  22. Mi apoyo a todos los tertulianos del mapa periodístico español, incluídos del de “Sávame”. Si el tertuliano fuera un invento exclusivamente español, que no lo se (no lo creo) deeríamos exportarlo y cobrar copyrights. Y no estoy siendo en absoluto irónica. Afortunadamente no estoy sola: (“En fin, Tirado, a mí los tertulianos, desde Carlos Dávila a Jabois pasando por Antonio Papel, todos y todas, me gustan mucho”, Cebolla Madriles).

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