Con San Francisco Javier, un perfil misionero
Este domingo celebramos a San Francisco Javier, Patrono de las Misiones.
Es cierto que su coincidencia con el primer Domingo de Adviento pueda dejar un poco más “mermada” la presencia y el recuerdo de San Francisco Javier. En alguna celebración de la Santa Misa lo máximo que he oído es “feliciten a los Francisco Javier”, algo que está bien, ¡muy bien!, pero ¿no debemos buscar algo más a quien tanto ha aportado y sigue aportando a la Misión de la Iglesia?
Estos días intentaba hacer un “perfil misionero”, algunas características que deberíamos tener todos los discípulos misioneros, orando y reflexionando sobre textos de San Francisco Javier, especialmente sobre sus cartas misioneras.
Y es lo que este Domingo voy a hacer, con la libertad que me confiere la Revista 21 y este Blog “Allegro Molto”, así como la confianza de Fernando Cordero ss.cc., de cuyos textos y última publicación (¿Qué pinta Dios hoy?, en la Editorial San Pablo), escribiremos más adelante.
Pero vayamos a la cuestión, ¿qué nos indica y ofrece San Francisco Javier para los discípulos misioneros del siglo XXI? Algunas notas:
- Imitar y hacer nuestros los comportamientos y las acciones salvíficas y misioneras de Cristo.
- Hacer carne de nuestra carne la pasión salvadora de Cristo.
- Apartarse de toda especie de avaricia, de este modo se mostrará que “de tal suerte, que ningunos puedan sospechar de nosotros vamos más buscando lo temporal que lo espiritual”.
- Los discípulos misioneros deberían ser personas de mucho celo, bondad y simplicidad.
- Personas que no sean mudables.
- Comprometidos con sus ovejas, con el rebaño, y no con sus intereses y más si estos son económicos y mercantiles.
- Personas de mucha humildad, que no sea notado de soberbia.
- Para trabajar en equipo, personas que sean afables y apacibles con los que conversan.
De alguna manera, estas recomendaciones de San Francisco Javier las podemos encontrar en las palabras que sobre la misión nos va entregando, poco a poco, el Papa Francisco, en muchas de sus intervenciones y documentos.
Es vivir el discipulado misionero con la presencia de la justicia y la fe, la caridad y la justicia, viviendo con intensidad la alegría del Evangelio.
Que San Francisco Javier interceda por todos nosotros, para que nunca olvidemos que lo esencial es la naturaleza misionera de la Iglesia, porque nace la Iglesia al existir la Misión y no al revés. En ocasiones lo olvidamos, y eso nos provoca desviaciones en nuestro compromiso misionero.
¡Misioneros y Misioneras!, ¡discípulos misioneros y misioneras!, ¡Iglesia Misionera!, ¡Feliz Día de San Francisco Javier!
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